El fotoperiodista independiente Vladjimir Legagneur, de 30 años, salió de su casa el miércoles 14 de mañana rumbo a Grand Revine, uno de los barrios más pobres de Puerto Príncipe, para hacer un reportaje sobre las condiciones de vida en ese lugar. Nunca volvió.

Ese mismo día su esposa, Fleurette Guerrero Legagneur, hizo la denuncia ante la Policía, que recién inició la búsqueda del fotoperiodista unos diez días después, el fin de semana pasado. El lunes, el portavoz de esta institución, Frantz Lerebours, dijo al diario haitiano Le Nouvelliste que las posibilidades de encontrar a Legagneur vivo se están “reduciendo considerablemente”. Agregó que las autoridades ya descartaron la hipótesis de que el trabajador haya sido secuestrado, porque no hubo un pedido de rescate. El funcionario agregó que “esperan un desenlace fatal” pero que, mientras “no haya un cuerpo”, se sigue tratando como un caso de desaparición.

El gobierno de Haití se pronunció por primera vez sobre la desaparición de Legagneur el lunes –12 día después–, mediante un texto del Ministerio de Comunicación que expresaba su “solidaridad con la familia de Vladjimir y toda la comunidad de la prensa en Haití”. El comunicado afirmaba además que “las autoridades policiales y la Justicia están trabajando duro sobre su desaparición para que se arroje luz sobre este tema”.

La desaparición de Legagneur también activó las alarmas de los sindicatos de la prensa haitiana, que criticaron el trabajo “lento” de la Policía, reclamaron al gobierno que esclarezca rápidamente el caso y dé garantías a quienes ejercen la profesión. La Asociación Nacional de Medios de Comunicación de Haití lamentó en un comunicado que “en pleno siglo XXI”, la sociedad haitiana “vuelva a las desapariciones y a los traumas que recuerdan a los períodos más oscuros” de la historia del país.

En tanto, la Oficina de Protección Ciudadana llamó a las autoridades a intensificar los esfuerzos en la búsqueda del fotoperiodista y recordó los casos de varios activistas desaparecidos en las últimas tres décadas que nunca fueron esclarecidos.