Falta poco más de un mes para el próximo congreso del PIT-CNT, y las diferentes corrientes y sindicatos comienzan a hacer circular sus documentos, de cara a una instancia que podría alterar la correlación de fuerzas dentro de la central sindical durante la próxima campaña electoral.

En ese contexto, la Confederación de Organizaciones de Funcionarios del Estado (COFE), gremio que es el corazón de la lista 41 del PIT-CNT, elaboró un documento en el que pone en tela de juicio una de las principales definiciones que la central sindical aprobó en su congreso anterior, en 2015: que existe un bloque social y político de los cambios, contrapuesto a uno conservador y de derecha.

“Hoy más que nunca se impone que nuestra clase rediscuta la política de alianzas, y en particular, el papel que cumple dicho ‘bloque’ en esta etapa y cuál es el papel que le corresponde a los trabajadores en el mismo”, dice el documento. La revisión es necesaria, según COFE, porque el denominado bloque de los cambios de hecho “incluye sectores que defienden los intereses del capital y que han predominado en la conducción económica del país”. Por lo tanto, “rechazar la ‘restauración conservadora’ no implica, como contrapartida, el apoyo irrestricto al llamado ‘bloque político y social de los cambios’, como si fuera una fuerza homogénea cuyo objetivo es defender los intereses de los trabajadores”.

El planteamiento es motivado en buena medida porque en ese bloque de los cambios está incluido el gobierno del Frente Amplio (FA). Para COFE, en 12 años ese gobierno no “llevó adelante un proyecto de cambio estructural alternativo para reducir el dominio del capital en la economía nacional”, y en él no “existen indicios de un proyecto anticapitalista de mediano y largo plazo”.

Joselo López, secretario general de COFE, consideró que durante los gobiernos del FA se “ha planteado una política de conciliación de clases asimétrica”, debido a la cual, si bien “los trabajadores conquistaron muchos avances”, la balanza se inclinó a favor de los capitalistas, “con exoneraciones tributarias a grandes corporaciones”, de modo que la carga impositiva “es mayor” para el trabajo que para el capital.

Según el documento de COFE, el concepto de “gobierno en disputa” que se ha manejado dentro del FA “es una categoría de análisis insuficiente” ya que “parecería referirse a un equilibrio de fuerzas” que en los hechos no fue tal “en la mayoría de los temas de fondo”. En cambio, el sindicato asegura que el gobierno “optó por atender a otros demandantes y apeló a la conciliación de clases, beneficiando al capital y redistribuyendo un poco mejor el ingreso, pero no la riqueza, que cada vez está más concentrada”.

López explicó que lo que se busca con el documento es “poner en debate si realmente existe un bloque social y político de los cambios”, o si en realidad se está ante una “realidad diferente, que necesita otra definición del movimiento sindical”.