El escudo antimisiles israelí, llamado Cúpula de Hierro, detuvo anoche algunos de los proyectiles lanzados desde Siria a la zona ocupada de los Altos del Golán. Los otros impactaron en ese territorio sin dejar víctimas, informó la prensa israelí. “Dispararon aproximadamente 20 proyectiles, la mayoría cohetes, hacia la primera línea de defensa del Ejército en el norte. Estos cohetes fueron disparados por la fuerza iraní Quds”, afirmó el vocero del Ejército de Israel Jonathan Conricus, según citó la agencia de noticias Efe.

A los residentes en la zona se les pidió ayer que se mantuvieran en refugios antiaéreos. Un día antes, el Ejército de Israel había manifestado que el país se encontraba en “alerta alta ante un ataque”, después de “identificar actividad irregular de las fuerzas iraníes en Siria”.

Pero el primer ataque se sintió en territorio sirio, donde Irán apoya al gobierno del presidente Bashar al Assad. El mismo martes, se conoció la noticia de que misiles israelíes habían impactado en plataformas y almacenes misilísticos de la Guardia Revolucionaria iraní en Siria. La información fue divulgada por distintas agencias de noticias y por la organización civil opositora Observatorio Sirio de Derechos Humanos, que precisó que ocho de los 15 muertos que dejó el ataque eran iraníes.

Las autoridades militares de Israel anunciaron el martes que el Ejército estaba “preparado para varios escenarios”, y advirtieron que “cualquier agresión contra Israel” recibiría “una respuesta severa”. Anoche, el vocero militar Conricus afirmó: “Hemos respondido al ataque”, aunque no dio más detalles.

El incidente ocurrió en la misma semana en la que Estados Unidos abandonó el acuerdo internacional sobre el programa nuclear iraní, una decisión promovida y celebrada por el gobierno del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.