El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, y su portavoz parlamentaria, Irene Montero, anunciaron el sábado la convocatoria a una consulta para que la militancia decida si deben mantener sus cargos en el partido y en el Parlamento español. Ayer, en una conferencia de prensa, el secretario de Organización de Podemos, Pablo Echenique, confirmó que la convocatoria de Iglesias y Montero fue respaldada por la dirección partidaria. La consulta comenzará hoy y se extenderá hasta el domingo.

Los dos dirigentes de Podemos tomaron la decisión de consultar a sus bases unos días después de que se difundiera la noticia de que la pareja, que espera la llegada de hijos mellizos para antes de fin de año, compró una casa de más de 700.000 dólares en el municipio madrileño de Galpagar. La compra provocó las críticas de otros partidos españoles y fue muy cuestionada en las redes sociales. Los detractores afirman, en particular, que Iglesias y Montero perdieron credibilidad por comprar una casa lujosa, con jardín, piscina y cercana a las sierras, al tiempo que predican desde el partido una forma de vida más austera.

“Lo que tiene que hacer un dirigente político decente cuando se cuestiona su credibilidad es someterse al criterio de las bases”, argumentó ayer Iglesias ante el Congreso.

Echenique dijo que la dirección del partido no debatió sobre la compra de la casa en sí, sino acerca del “nivel de acoso y persecución que sufre la familia de Iglesias y Montero”, que, a su entender, es “desmesurado”. Y agregó: “Es muy peligroso continuar por esta vía, no sólo para la familia de Iglesias y Montero, sino para toda nuestra democracia”.