La Corte Suprema de Chile se pronunció sobre la situación de un terreno en la localidad de Puyehue, en la región de Los Lagos, en el sur de Chile, por el que mantenían una disputa la comunidad mapuche y la nieta del dictador Augusto Pinochet, Francisca Ponce Pinochet. Se trata de un terreno que es reclamado como propio por la comunidad mapuche, en particular por el matrimonio conformado por Anatolio Guerrero y Juana Llanquileo, que son descendientes de los propietarios ancestrales de esas tierras.

En el marco de este reclamo, el matrimonio y otros mapuches ocuparon el predio en 2014, cuando este figuraba como propiedad de una sociedad integrada por varias personas, entre ellas Ponce. Un año después la nieta de Pinochet compró el terreno a título personal y presentó un reclamo ante la Justicia para que fuera desocupado. Un tribunal de primera instancia se pronunció a favor de Ponce y ordenó la desocupación del predio, pero la medida quedó suspendida cuando se presentó la apelación, que resultó favorable a los mapuches. Así llegó el caso a la Corte Suprema, cuyo pronunciamiento afecta sólo a este caso particular, pero se considera que será de referencia para situaciones similares.

La Corte Suprema dictaminó que Ponce no tiene derecho a reclamar el desalojo del predio porque lo compró después de que fuera ocupado. Ponce “adquirió la posesión cuando el predio ya había sido objeto de la ocupación que se repudia”, indica el texto. Además, establece que el terreno debe ser devuelto a la familia mapuche que lo reclama y no puede ser desocupado a la fuerza.