“Yo quiero que haya transparencia en el financiamiento de campaña, cosa que en Capital se logró, en otros lugares no”, dijo la diputada Elisa Carrió en el programa de Jorge Lanata, Periodismo para todos. No hubo una repregunta sobre el tema de las personas que figuran como aportantes de la coalición Cambiemos en la campaña de 2015 pero que no reconocen haber colaborado con su financiación. El partido que lidera Carrió, Coalición Cívica, integra la alianza de gobierno junto a Propuesta Republicana (PRO), del presidente Mauricio Macri, y la Unión Cívica Radical.

Lo que inicialmente fueron algunos casos aislados se fue ampliando en las últimas semanas y se estima que 25% del financiamiento de Cambiemos en la provincia de Buenos Aires corresponde a los llamados “aportantes truchos”.

El caso fue revelado originalmente por el medio digital El Destape e implicaba a 250 personas, la mayoría de pocos recursos, que figuraban como aportantes pero no se reconocían como tales. A esa lista original se fueron sumando ex candidatos, concejales y personas inscriptas como afiliados a Cambiemos, que ante las consultas de distintos medios de comunicación reconocieron que figuraban en las listas pero no habían hecho aportes.

Uno de los casos es el de Osvaldo Marasco, ex candidato de la alianza gobernante a intendente de Ituzaingó (provincia de Buenos Aires). “Yo mismo figuro con 50.000 pesos de aporte en el 2015, y no los puse ni hay ningún documento donde figure la transacción, que por supuesto tampoco es parte de mi declaración jurada correspondiente”, dijo al diario Página 12. Además, refiriéndose a la gobernadora de la provincia, María Eugenia Vidal, agregó: “Esta chica conoce todos los pormenores de la campaña y las suciedades del PRO”.

En el ámbito judicial este asunto todavía no alcanzó a los responsables políticos de Cambiemos. El caso es investigado por la Justicia electoral y la federal, y los imputados son los responsables legales de PRO, pero no quienes fueron electos en la campaña bonaerense con presuntas irregularidades: la propia Vidal, los senadores Esteban Bullrich y Gladys González, y los diputados Graciela Ocaña y Héctor Flores, que encabezaban las listas de Cambiemos en la provincia. Las causas judiciales están avanzando y la semana pasada fueron convocadas a declarar como testigos 50 personas que no reconocen haber sido aportantes pero figuran en las listas.

El caso ha ganado trascendencia política con los pronunciamientos de diferentes dirigentes, e integrantes del oficialismo se vieron obligados a referirse a este asunto. Vidal y Bullrich lo hicieron en dos oportunidades diferentes, pero en la misma línea: reivindicaron la transparencia con la que se dirigió la campaña y aseguraron que están a disposición de la Justicia para presentar toda la documentación necesaria para aclarar la situación. “No hay nada que ocultar”, dijo Vidal, y agregó que se trata de una “denuncia kirchnerista”. Además, los dos terminaron hablando de que es necesaria una ley que obligue a los partidos políticos a que todos los aportes sean bancarizados.

Pero desde la oposición se exige más al oficialismo. La senadora de la provincia de Buenos Aires María Teresa García, de Unidad Ciudadana (kirchnerista), recurrió a la Justicia para pedir una investigación por sospechas de lavado de dinero y usurpación de identidad. Por su parte, la ex diputada y líder de Generación Encuentro Nacional, Margarita Stolbizer, aseguró que estos casos no surgen de un “error” sino de “una maniobra delictiva”.