Las tres comisiones del Senado que tratan el proyecto de ley para despenalizar la interrupción voluntaria del embarazo en Argentina –Salud, Asuntos Constitucionales y Justicia– no lograron aprobar un predictamen con modificaciones, por lo que el 8 de agosto los senadores debatirán el texto tal como fue aprobado por la Cámara de Diputados.

Esta resolución complica el escenario para quienes buscan legalizar el aborto, ya que muchos senadores adelantaron que sólo votarían a favor si el proyecto incluye las modificaciones. Entre otros cambios, estos legisladores proponen acortar el plazo para que se practique un aborto de la semana 14 a la 12 de gestación e incorporar la objeción de conciencia institucional.

Con 26 firmas, el texto con modificaciones quedó a una sola de obtener la mayoría absoluta y lograr que fuera el elegido para la votación de la semana que viene. En tanto, los senadores que rechazan la iniciativa evitaron presentar un proyecto propio.

El 8, el Senado va a decidir en primer lugar si el dictamen con modificaciones puede ser mayoritario o no. En caso de que sea considerado válido, el texto se votaría, con altas posibilidades de que sea aprobado. Si los senadores consideran que el dictamen con los cambios no es legítimo, pasarían a votar el texto tal como fue aprobado en Diputados.

Si se diera este último escenario, quienes se oponen a la legalización del aborto correrían con ventaja. Hasta ayer, según informó el diario La Nación, 35 senadores –en un total de 72– ya confirmaron que votarán en contra, mientras que 31 aseguraron que apoyarán el proyecto. En tanto, una senadora se abstendrá y otra ya adelantó que estará ausente. Los otros cuatro todavía no se decidieron.