Washington impuso sanciones económicas contra dos integrantes del Ejecutivo de Recep Tayyip Erdogan en respuesta por la prisión preventiva dispuesta para el pastor estadounidense Andrew Brunson, acusado de estar vinculado con el proscripto Partido de los Trabajadores del Kurdistán y con el intento de golpe de Estado de 2016. El gobierno turco advirtió que responderá las sanciones con “medidas equivalentes”.