El colombiano Yilen Osorio, un investigador de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (Cicig, vinculada con la Organización de las Naciones Unidas), fue detenido el sábado en el Aeropuerto Internacional La Aurora, en la capital guatemalteca. El caso se enmarca en las tensiones entre el presidente de Guatemala, Jimmy Morales, y la Cicig, que comenzaron hace un año y medio y enfrentaron a dos poderes del Estado.

En agosto de 2017, Morales declaró persona non grata al comisionado a cargo de la Cicig, Iván Velásquez, pero no pudo expulsarlo del país. Desde entonces recorrió otros caminos. Anunció que no renovaría el mandato de esa comisión, decidió no renovarles las visas a sus integrantes y les pidió que se fueran de Guatemala, pero la Justicia dejó sin efecto esas decisiones. Finalmente, Osorio dejó Guatemala, al igual que los otros diez miembros de la comisión, pero lo hizo para irse de vacaciones. El sábado, cuando fue detenido, volvía al país.

Varias organizaciones y dirigentes sociales cuestionaron la decisión del gobierno de impedirle al funcionario el ingreso y retenerlo. Por su parte, la organización civil Acción Ciudadana fue más allá y denunció al ministro del Interior, Enrique Degenhart, la ministra de Relaciones Exteriores, Sandra Jovel, y el procurador general de la Nación, Jorge Luis Donado, por los delitos de abuso de autoridad, usurpación de funciones y desobediencia de las decisiones judiciales, informó la agencia de noticias Efe.

A su vez, la fiscal general guatemalteca, María Consuelo Porras, pidió ayer la captura de todas las personas que estén involucradas en la retención de Osorio e incumplan las resoluciones judiciales vinculadas con la Cicig.