En el marco de una entrevista que le hizo el programa Poder en foco, que emite SBT, afín a su gestión, el mandatario brasileño, Jair Bolsonaro, afirmó que el ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva es una “carta fuera del mazo” pensando en los comicios presidenciales que se realizarán en 2022. Cuando se le preguntó acerca de la influencia del Partido de los Trabajadores y del ex presidente en la instancia electoral, el dirigente ultraderechista afirmó: “Así Lula no vaya preso y continúe en libertad, él ya fue condenado en segunda instancia, por lo que no va a poder participar en las elecciones. Además, el ya no es un referente electoral para nadie. Cuando yo andaba recorriendo Brasil en la campaña electoral era recibido en los aeropuertos por millares de personas, pero la prensa no informaba de eso”. Luego agregó: “Lula ahora en sus pocas recorridas por el país es criticado y silbado. Entonces, creo que él es una carta fuera del mazo”.

El actual mandatario reiteró sus deseos de ser candidato en 2022, aunque recordó que durante la campaña electoral prometió que no sería candidato nuevamente en caso de que la reforma política del país que pretende realizar esté viabilizada. “Como eso no sabemos si va a pasar, si estoy bien, voy a presentarme”, agregó, según consignó la revista Fórum.

Además, al hacer un balance de su primer año de gobierno, que se cumplirá el primer día del año que viene, Bolsonaro se mostró positivo respecto de algunos indicadores. “Tuvimos la menor tasa Selic [tasa básica de intereses] que se podía imaginar (4,5%). El riesgo de Brasil está allá abajo y la inflación está en la media proyectada. Esos datos estimulan a las personas a invertir”, afirmó el presidente, que en su resumen evitó temas muy presentes en la actualidad brasileña, como el abrupto aumento del precio de la carne, la suba de la nafta y la cantidad de desempleados y trabajadores informales que hay en el país.

De acuerdo con datos oficiales difundidos en noviembre, la tasa de desempleo en Brasil se ubicó en 11,6% de la población económicamente activa en el trimestre concluido en octubre, con un total de 12,4 millones de personas que no tienen trabajo. El número de brasileños desempleados cayó 0,2 puntos porcentuales, del 11,8% registrado en julio a 11,6% en el trimestre concluido en octubre, según datos del estatal Instituto Brasileño de Geografía y Estadística, que, pese a la reducción, considera que el índice se mantuvo estadísticamente estable.

El mismo estudio reveló también que la cantidad de trabajadores informales llegó a los 11,9 millones, un aumento de 2,4% frente al mismo período de 2018 y que representa el mayor nivel de informalidad registrado en el país.

Por otra parte, y como era de esperar, durante su entrevista con la SBT el presidente celebró que al terminar el año no haya surgido ningún caso de corrupción en su gestión. Evitó hacer referencia, entre otros episodios, al escándalo que involucra a uno de sus hijos, el senador Flávio Bolsonaro, acusado de asociación para delinquir por manejos ilegales de dinero en la Asamblea Legislativa del estado de Río de Janeiro.