Ayer era el día fijado para que comenzara el plan del gobierno de Mauricio Macri por el cual 64 artículos ingresarían a la lista de productos esenciales, una de las medidas anunciadas la semana pasada para bajar los precios e intentar paliar la difícil situación económica que atraviesan millones de argentinos. Pero varios comercios informaron que muchos de esos ítems todavía no llegaron con los nuevos precios, y que tardarán algunos días e incluso semanas en alcanzarlos, informó Página 12.
El presidente argentino se reunió con empresarios del rubro de los alimentos cuyos productos están incluidos en el acuerdo para transmitirles su agradecimiento por “el compromiso de mantener por seis meses” el precio de esa canasta. Pero el “pacto de caballeros” entre el gobierno y los empresarios al que se refirió el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, al anunciar esta política, parece no haberse respetado.
Según informó el diario Tiempo Argentino, las empresas que negociaron con el gobierno aumentaron por encima de 10% el valor de los productos la semana anterior a los anuncios. De esta manera, se aseguraron un colchón que les permitirá solventar el mantenimiento de los precios sin que que se reduzcan sus ganancias. Según un documento al que accedió ese periódico, la empresa Molinos, un gigante del mercado alimenticio, pasó hace dos semanas una lista de precios dirigida a los supermercados y mayoristas en la que se registraban aumentos de entre 5% y 9% en productos como yerba y aceite. Del mismo modo, se supo que la productora de arroz Carogran, que envasa para las marcas propias de las principales cadenas de supermercados, dispuso aumentos de 12%.
La lista de precios, que deberán mantenerse durante seis meses, incluye aceite, leche y yogures, yerba, harina, fideos, arroz, polenta, conservas, galletitas, mermeladas, bebidas, azúcar e infusiones. Los precios varían según la región, y convivirán con la actualización de valores de los 579 artículos del programa Precios Cuidados, compuesto por otras marcas y cuyo listado se ajustará en mayo por cuatro meses, informó Página 12.
Entre las medidas impulsadas por Macri y anunciadas por Dujovne se incluye la rebaja de tres cortes de carne –asado, vacío y matambre– pero esta iniciativa fue duramente criticada por varias asociaciones de consumidores. “¿Cómo van a influir en el consumo masivo de carne vacuna con apenas 480 toneladas mensuales?”, se preguntó Pedro Bussetti, titular de Deuco, una de estas organizaciones, al ser consultado por Tiempo Argentino. El consumo de carne vacuna en Argentina es de alrededor de 200.000 toneladas mensuales, y la propuesta gubernamental equivale a 0,24% del total. “Van a decir que la canasta de alimentos del programa incluye carne. Pero es en cantidades tan bajas que va a ser muy difícil conseguirla”, dijo.
Las asociaciones de consumidores también criticaron la falta de puntos de venta para acceder a los tres cortes vacunos que están incluidos en la oferta. La mitad de la carne será vendida desde puestos en el Mercado Central, ubicado cerca de Capital Federal. La otra mitad se venderá en las bocas de expendio de los frigoríficos exportadores que conforman el Consorcio de Carnes ABC. Esta entidad agrupa a una veintena de frigoríficos que están radicados en su enorme mayoría en la provincia de Buenos Aires, tres están en Santa Fe, uno en Córdoba y otro en La Pampa.
Osvaldo Bassano, titular de Aduc, otra organización de consumidores, afirmó que “el listado de los productos no cubre las necesidades de una familia; es más, fomenta la mala alimentación, no una de calidad”.
Además, las asociaciones de consumidores denunciaron que las empresas suelen utilizar varios mecanismos para evadir el acuerdo de precios: la ausencia de productos en las góndolas, la falta o poca visibilidad de la cartelería y la presentación de productos similares que no son parte del programa a precios superiores.