En una ceremonia signada por un fuerte cuño ideológico en la que se firmó un convenio para la implementación de 216 escuelas militares de acá a 2023, el presidente brasileño, Jair Bolsonaro, atacó a sus adversarios políticos y afirmó que si le dijeran un lugar en el que un gobierno de izquierda haya hecho bien las cosas, él saldría a gritar “Lula libre”.
“La izquierda no hizo las cosas bien en ningún lugar del mundo. Si me dicen un lugar donde hicieron algo bien me avisan y yo cambio y empiezo a gritar ‘Lula libre’ por ahí”, afirmó Bolsonaro, refiriéndose a la consigna embanderada por los partidarios del ex presidente actualmente encarcelado.
Según informó la revista Fórum, Bolsonaro afirmó que va a “imponer” la militarización en las escuelas públicas.
“Es absurdo que un estudiante no sepa una regla de tres, no sepa interpretar un texto ni responder una pregunta básica de ciencia. No hay que preguntarle al padre irresponsable en ese tema si él quiere o no una escuela con cierta militarización. Eso se tiene que imponer. No queremos que esa muchachada crezca y pase el resto de su vida dependiendo de programas sociales del gobierno”, afirmó el mandatario brasileño.
Por su parte, el ministro de Educación, Abraham Weintraub, también presente en el acto, afirmó que va a cumplir con la determinación de Bolsonaro de imponer la militarización en las escuelas. “Si el presidente lo dijo, la palabra del presidente es la más importante del Ejecutivo”, afirmó Weintraub, quien en la apertura de la ceremonia también brindó un discurso marcadamente ideológico.
“Nunca más un régimen totalitario puede ser implantado en Brasil. Nunca más tendremos una ideología externa intentando imponerse a los brasileños. Nunca más el presidente de otro país puede cuestionar la soberanía del nuestro. La gente nunca puede olvidar que nuestra bandera jamás será roja”, afirmó el jerarca.