El presidente brasileño Jair Bolsonaro y el ex mandatario Luiz Inácio Lula da Silva mantuvieron un duelo dialéctico motivado por un ataque del líder ultraderechista al líder del Partido de los Trabajadores (PT) con motivo del actual enfrentamiento entre Estados Unidos e Irán.

Este miércoles, al mismo tiempo que el presidente estadounidense Donald Trump daba un discurso luego de los primeros ataques iraníes contra bases de Estados Unidos en Irak, Bolsonaro hizo una transmisión en vivo por medio de Facebook en la que se lo veía escuchando el discurso del mandatario norteamericano, siguiendo la línea de obsecuencia que el ultraderechista nunca ocultó. Posteriormente, tras las palabras de Trump, Bolsonaro afirmó que el gobierno del PT que encabezaba Lula avaló el enriquecimiento de uranio de Irán.

La respuesta del ex mandatario izquierdista llegó poco después mediante un comunicado. “Jair Bolsonaro miente”, afirmó Lula, quien agregó que lo dicho por el actual presidente nunca sucedió. “Eso jamás pasó. Es una mentira que fue reproducida por los medios de comunicación y que es fácilmente rebatible con una simple búsqueda en Google”.

Lula afirmó que el denominado Acuerdo de Teherán, firmado en 2010, es considerado hasta hoy el mejor acuerdo nuclear logrado con Irán. “El propio [Barack] Obama escribió una carta en la que dijo expresamente que las [condiciones] conseguidas en aquella negociación hecha por Brasil y Turquía eran las ideales”, afirmó el líder petista de 74 años de edad.

Este acuerdo, según recordaron medios brasileños, preveía que Irán enviase a Turquía algo más de una tonelada de uranio de bajo enriquecimiento para que fuese sustituido por uranio enriquecido a 20% para ser utilizado en investigaciones médicas. Entre las condiciones del acuerdo, se estipulaba que habría una supervisión por parte de inspectores turcos e iraníes. En su momento Lula calificó el acuerdo de “una victoria diplomática”.

Mientras tanto, las actuales relaciones entre Irán y Brasil se encuentran en un momento delicado, luego de que el gobierno de Bolsonaro reaccionara con beneplácito ante el asesinato del general Qasem Soleimani. En un comunicado, Itamaraty expresó su apoyo “a la lucha contra el flagelo del terrorismo”.

Siguiendo esa línea, este miércoles la cancillería brasileña canceló una reunión que la encargada de negocios en la embajada en Teherán, Maria Cristina Lopes, mantendría con representantes iraníes. Según informó Folha de São Paulo, varios fueron los factores que llevaron al gobierno brasileño a adoptar esa decisión. La reunión, si bien en la agenda tenía como eje cuestiones culturales, inevitablemente iba a desembocar en la cuestión bélica entre Estados Unidos e Irán, e Itamaraty entendió mejor que el tema fuera abordado más adelante por el embajador brasileño en Teherán, Rodrigo de Azeredo, quien actualmente se encuentra en su país recuperándose de un tratamiento médico.