El Departamento de Estado estadounidense informó mediante un comunicado que no retirará sus tropas de Irak, como se lo había pedido el jueves el primer ministro iraquí, Adel Abdul-Mahdi, al secretario de Estado Mike Pompeo. Según informó la agencia de noticias Reuters, Estados Unidos afirma que la presencia de sus soldados en territorio iraquí es “apropiada”, aunque también reconoce que es necesario “que haya una conversación entre los gobiernos de Estados Unidos e Irak, no sólo respecto de cuestiones de seguridad”, sino también sobre la “asociación financiera, económica y diplomática” entre los dos países.

El primer ministro interino de Irak había pedido a Pompeo que enviara una delegación al país con el objetivo de poner en marcha el mecanismo para la retirada de las tropas estadounidenses, porque el enfrentamiento entre Estados Unidos e Irán ha dejado al territorio iraquí como escenario de ataques en la última semana. En Irak, Washington asesinó al general iraní Qasem Soleimani, y en respuesta las bases militares estadounidenses en ese país recibieron el impacto de misiles lanzados por Teherán. Las autoridades iraquíes manifestaron que rechazan de plano todas las violaciones de su soberanía, tanto las estadounidenses como las iraníes.

En el marco de este conflicto, el presidente estadounidense, Donald Trump, comunicó ayer la aplicación de nuevas sanciones contra Irán, medidas que afectan a ese país en el aspecto económico y que también implican el congelamiento de activos y la negación de visas a funcionarios que tengan intención de viajar hacia Estados Unidos.

Tanto este país como Canadá acusaron a Irán de haber derribado el miércoles un avión comercial perteneciente a una compañía ucraniana, Ukraine International Airlines. En ese incidente murieron 176 pasajeros –entre ellos 82 iraníes, 57 canadienses, 11 ucranianos, diez suecos, cuatro afganos, tres británicos y tres alemanes–. De acuerdo con varios gobiernos, entre ellos el de Ucrania, debido a un error el avión fue derribado por un misil lanzado por el Ejército iraní.

Esa hipótesis de que la caída del avión no se debió a un accidente aéreo fue reforzada por un video publicado por el diario estadounidense The New York Times en el que parece verse un misil impactando contra un avión. De acuerdo con el periódico, el incidente ocurrió muy cerca del aeropuerto de Teherán, el área donde el avión ucraniano dejó de transmitir su señal a tierra antes de explotar.

Después de que también fuentes de inteligencia estadounidenses apuntaran a la hipótesis del derribo, el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, anunció que su gobierno tenía información de que el vuelo en el que viajaban decenas de canadienses cayó debido al impacto de “un misil iraní”, pero que la acción pudo tratarse de un error.

En principio el gobierno de Irán negó categóricamente esta hipótesis e invitó al gobierno canadiense a aportar cualquier tipo de información sobre el caso a la comisión investigadora que lo está tratando. Sin embargo, anoche el presidente de Irán, Hasan Rohani, informó que las Fuerzas Armadas del país verificaron que “lamentablemente, misiles lanzados por un error humano causaron la horrible caída del avión ucraniano y la muerte de 176 personas inocentes”.

La caída del avión fue mientras Irán lanzaba misiles contra dos bases militares en Irak en las que están asentadas tropas estadounidenses. De acuerdo al comunicado emitido esta madrugada, “en esa situación muy delicada y de crisis”, el avión se situó cerca de un centro militar de los Guardianes de la Revolución con “una altura y una posición de vuelo de un objetivo enemigo”. Considerando que podía tratarse de una respuesta de Estados Unidos ante el ataque, y teniendo en cuenta “el aumento sin precedentes de los movimientos aéreos en la región”, en especial de “vuelos de guerra de las fuerzas estadounidenses alrededor del país”, las Fuerzas Armadas derribaron el aparato.

“Para defendernos de posibles ataques del Ejército estadounidense, las Fuerzas Armadas de la República Islámica de Irán estaban en alerta total, lo que desafortunadamente llevó a esta terrible catástrofe”, agrega Rohani en el comunicado. “Se necesita más investigación para identificar todas las causas y raíces de esta tragedia y enjuiciar a los responsables de este error imperdonable”, añadió.

El presidente ucraniano, Vladimir Zelenski, respondió ante este comunicado manifestando que espera de Irán un “pleno reconocimiento de culpabilidad” por el derribo. “Esperamos de Irán que lleve a los responsables ante la Justicia, devuelva los cuerpos, pague una indemnización y publique una disculpa oficial. La investigación tiene que ser completa, abierta y debe continuar sin retrasos o obstáculos”, señaló en un mensaje de su cuenta de Twitter.