El médico y ex candidato frenteamplista a la Intendencia de Montevideo Álvaro Villar propone en su plan de gestión para el Hospital de Clínicas encarar un enfoque de “hospital en red”, que interactúe con los demás niveles de atención, procurando mejoras para el paciente en poco tiempo a través de equipos y personal “muy especializados”. Además, pretende que todos los procesos internos “se hagan formando personas” y priorizando “la alta dedicación de los recursos”, entre otros planes.

En el documento al que accedió la diaria, en que Villar plantea sus lineamientos generales para la gestión, menciona que se trata de “un hospital de enorme complejidad” por su tamaño y su diseño de atención. “Es un monumento a la importancia que le da nuestro país a la salud pública, a la Universidad y al Estado benefactor”, agrega.

En atención a esa dimensión, Villar adelantó algunas líneas de acción “para contestar a la pregunta de cómo haremos para que el Clínicas sea un hospital de excelencia en la asistencia sanitaria, en la docencia universitaria, en la investigación, en la gestión de los recursos, en la generación de conocimientos, de definición de pautas, procedimientos y protocolos sanitarios, de excelencia en seguridad hospitalaria”.

El ex candidato frenteamplista entiende que “un proyecto de desarrollo del Hospital de Clínicas debe encararse desde un enfoque de hospital en red, articulando con el primer nivel de atención (PNA) y con un enfoque de salud comunitaria”. En esa línea, considera que “es absurdo pensar que un hospital deba tener todos los recursos necesarios, por lo que es indispensable pensar al Hospital de Clínicas como parte de un sistema que se debe relacionar permanentemente intercambiando estos recursos y aportando al sistema aquellas utilidades y prestaciones que el sistema necesita y que el Clínicas puede aportar”.

El primer punto de su presentación refiere al Clínicas como hospital universitario: “Tiene una relación universitaria con el conocimiento; esto significa que todo lo que hagamos en el hospital debe regirse por el concepto de hacer el mayor bien posible por el paciente, evitando el daño innecesario”. También marca el concepto de “hospital colaborativo” y “más horizontal”, donde se debe “colocar el concepto de autoridad en su justo lugar”, permitiendo “el debate y dar campos abiertos a la discrepancia, para dar aire a la elaboración colectiva”.

En esa línea, Villar agrega: “Otro principio de la concepción universitaria es que todo lo que haga el hospital, todos los procesos, se hagan formando personas, que se pueda aprender mientras funciona el hospital, que todas las tareas que se realicen —incluso en áreas no asociadas a las carreras, como en compras, en recursos humanos, en cocina, en lavandería, en mantenimiento, en limpieza, en seguridad— permitan formar recursos”.

Relativo a los recursos humanos, otro de sus objetivos es “atraer al hospital a los equipos de investigación que hoy prefieren otros lugares para trabajar”.

En un segundo capítulo del documento, Villar plantea “la excelencia como meta y forma de trabajo en sus cuatro áreas: asistencia, docencia, investigación y gestión”. En cuanto a la asistencia, expresa que el Clínicas debe ser “un hospital de corta estadía”, lo que se define “por una hiperconcentración de equipos de alto porte junto a servicios y equipos humanos muy especializados, que requieren de instalaciones y equipamientos especiales”. En ese sentido, pretende lograr “una gestión que garantice un giro-cama elevado, un tiempo de estadía corto, un aprovechamiento alto de las salas de block y de las camas de CTI”.

Respecto del personal del hospital, pretende “desplegar una estrategia de desarrollo humano donde se priorice la alta dedicación de sus recursos, con incentivos de distinta índole: formativos, académicos, económicos y de condiciones laborales”.

Relaciones institucionales

Acerca de la relación con la Universidad de la República, el médico plantea que debe ser “de cooperación”, buscando “una simbiosis donde el hospital universitario debe pensarse de tal forma que todas sus actividades puedan tener una vinculación con la enseñanza, implementar pasantías e internados, y que a su vez el hospital se enriquezca continuamente por los aportes y el trabajo de todos”.

En cuanto a la relación con la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE), expresa que es necesario definir con las autoridades “la cartera de servicios y para qué patologías el Hospital de Clínicas es referencia nacional”. También “debe negociarse la retribución por las prestaciones que ofrezca el hospital y el pago por las que demande de otros componentes del sistema”.

El ex director del Hospital Maciel promete “diálogo permanente con los servicios”, “relación permanente con los gremios”, “respaldo a las jefaturas” y “la construcción de un clima de trabajo y de relaciones amigables”. Añade que “la dirección es la imagen del Hospital hacia el exterior”, y debe ser “una imagen técnica, nunca partidaria o politizada”.

“Si buscamos una asistencia sanitaria innovadora, de excelencia, si aspiramos a la excelencia en cada acto asistencial, la dirección, la gestión del Hospital debe ser también de excelencia, debe ser más cercana, más amable, debe ser más humanista y más eficiente”, sentencia Villar en el documento que desarrolla sus líneas de acción para el Hospital de Clínicas.