El vocero del Centro de Almaceneros Minoristas, Baristas, Autoservicistas y afines del Uruguay (CAMBADU), Daniel Fernández, sostuvo que el sector gastronómico no se verá tan afectado por las medidas anunciadas el miércoles por el gobierno para controlar la pandemia de coronavirus, pero “a la movida de la noche la liquida”.
En declaraciones a Canal 4, Fernández dijo, no obstante, que el sector entiende que “lo primero es la salud” y lo importante es “que la población tome conciencia” de la situación, y que el 18 de diciembre el gobierno pueda dar buenas noticias al respecto.
Fernández además expresó algunas dudas sobre cómo se implementará el cierre de bares y restaurantes a partir de la medianoche. Por ejemplo, sostuvo que no está claro qué hacer si hay gente adentro de los locales a esa hora. “Entendemos que al que está adentro no lo vamos a echar con medio bocado”, interpretó. A su vez, dijo creer que los comercios gastronómicos podrán quedar habilitados a vender comida a través de servicios de delivery una vez pasada la medianoche, aunque resaltó que este punto tampoco ha sido especificado por las autoridades.
A su vez, Fernández sostuvo que en las próximas horas se reunirán con la intendenta de Montevideo, Carolina Cosse, y le plantearán “la imposibilidad de seguir pagando las tasas tan abusivas que tenemos de mesas y sillas en la calle”. “Le pedimos más metros, ya que no podemos usar las partes interiores de los comercios”, adelantó.
Según el gremialista, el sector gastronómico ha sido uno de los más afectados por la pandemia, y viene funcionando a 35% o 40%. “Basta recorrer la ciudad para ver que los boliches están vacíos”, dijo Fernández, que sostiene que actualmente hay 8.500 personas del rubro en seguro de paro. “Son todas personas bien formadas y muy profesionales. Se van a perder muchas fuentes de trabajo”, aseguró.