Este martes se están cumpliendo 1.000 días del asesinato de la edila brasileña Marielle Santos, quien fue baleada en la ciudad de Río de Janeiro en un atentado en el que también falleció el conductor del auto que la transportaba, Anderson Gomes.

En el momento de su asesinato Franco tenía 38 años y hasta el día de hoy no está claro quiénes fueron los autores materiales e intelectuales del crimen, que siguen siendo investigados por la Policía y el Ministerio Público.

Hasta el momento las únicas dos personas que están en prisión por el asesinato de la edila, del izquierdista Partido Socialismo y Libertad (Psol), son los ex policías Ronnie Lessa y Élcio de Queiroz, pero el juicio contra ellos aún no comenzó, en el marco de una investigación signada por las pistas falsas y la ausencia de una investigación profunda. No obstante, de acuerdo a lo que informó el diario O Globo, el secretario de la Policía Civil de Río de Janeiro, Allan Turnowski afirmó que quiere que el crimen de la edila y activista sea resuelto en forma prioritaria.

Anielle Franco, hermana de Marielle, dijo que no pierde la esperanza de resolver el asesinato de su hermana, pero expresó que muchas veces piensa que habrá respuestas sobre los precisos motivos que llevaron al crimen.

La sombra del clan Bolsonaro, cercano a las dos personas que están presas por el crimen, y su vinculación con las milicias de Río de Janeiro siempre estuvieron bajo la lupa, pero precisamente la investidura presidencial y la red de protección en su entorno no han hecho otra cosa que obstaculizar la tarea de la Policía y de la Justicia.

La arquitecta Mónica Benício, la viuda de Marielle, fue electa en las elecciones de noviembre como edila por Río de Janeiro por el Psol, el mismo cargo que ocupaba Franco en el momento en que fue asesinada. “Desde el punto de vista personal esta situación es muy dolorosa, porque no puedo cerrar el luto, porque no hay posibilidad de hacerlo si la Justicia no llega a la verdad. Esa lucha por que haya justicia tiene un costo emocional muy grande, entonces se hace muy difícil lidiar con estos 1.000 días sin respuestas”, afirmó.

Benício dijo que la manera de recordar a su esposa es seguir adelante con las luchas que ella estaba impulsando dentro del legislativo carioca, como la lucha por los derechos de la comunidad LGBT y otros proyectos de ley que fueron propuestos en su momento, pero nunca llegaron a aprobarse. En la entrevista con O Globo, la viuda de Franco aseguró tener la certeza de que el de su esposa fue un crimen político, que tuvo autores intelectuales, opinión que es compartida por vastos sectores políticos y sociales del país, que este martes recordaron el aniversario.

El Psol, además de convocar a actividades para homenajear a Franco, expresó en un comunicado que los que pasaron desde la muerte de edila “fueron mil días de mucha lucha por que haya Justicia, pero también de frustraciones. Hasta ahora, no hubo prácticamente ninguna respuesta de las investigaciones acerca de aquellos que ordenaron llevar a cabo este crimen político”.

En setiembre del año pasado, en el momento en que estaba dejando su cargo en la Fiscalía General de la República, Raquel Dodge informó que presentó la denuncia ante el Supremo Tribunal de Justicia contra cinco personas por interferir en las investigaciones del crimen. La jurista también pidió al tribunal la apertura de una nueva investigación para determinar quiénes fueron los autores intelectuales del asesinato de Franco y Gomes, además de solicitar que toda la investigación del caso pase al ámbito federal. Este pedido fue negado, por lo que el caso sigue a cargo de la Policía Civil y del Ministerio Público de Río de Janeiro.

La fecha del crimen de Franco fue recordada este martes en sus redes sociales por el ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva. “El asesinato de Marielle dice mucho sobre el Brasil en el que vivimos actualmente. Hace 1.000 días que el país espera respuestas. Hace 1.000 días que estamos presenciando la escalada del odio, de la política de amenazas, del preconcepto y de la intolerancia. Precisamos que haya paz y justicia. Justicia para Marielle y para Brasil”, afirmó el ex mandatario.