“Apoyamos el proyecto de ley presentado, no sin antes cuestionarnos por qué hay que impulsar una ley para que se respete otra ley vigente”. Con esas palabras, el movimiento Un Solo Uruguay estableció su apoyo a la iniciativa legislativa que tiene media sanción de la Cámara de Diputados, cuyo objetivo es limitar los territorios destinados a la producción forestal en el país.

La última sesión de Diputados mostró una inusual alianza entre el Frente Amplio (FA), Cabildo Abierto (CA) y el Partido Ecologista Radical Intransigente (PERI), que dejó en minoría a la mayoría de la coalición compuesta por blancos, colorados y el Partido Independiente, para aprobar un nuevo proyecto de ley forestal.

Este lunes Un Solo Uruguay emitió un comunicado en el que expresa que los integrantes del movimiento no son “partidarios de limitaciones productivas”, pero no consideran que este proyecto de ley las establezca, ya que “no desafecta suelos” de la propiedad forestal. A su vez, “reitera la posibilidad de forestar hasta 8% de campos ganaderos y agrícolas, lo cual suma la posibilidad de forestar más de un millón de hectáreas en todo el país”.

En la discusión en el Parlamento hubo fuertes cruces entre legisladores de la propia coalición de gobierno. En el comunicado Un Solo Uruguay se refirió al tema: “Lamentable es ver y escuchar cómo una discusión de carácter productivo y técnico se politiza y se deriva en peleas y pujas partidarias cuando se deja de lado lo importante. La inmensa mayoría de los argumentadores demuestran un desconocimiento absoluto del texto de la ley vigente (15.939) impulsada por el gobierno colorado en el año 87 y avalada por todos los gobiernos y legislaturas sucesivas hasta hoy”.

Según Un Solo Uruguay, esta actividad productiva creció 250% desde la aprobación de la ley original. Para el movimiento, “la forestación no compite en igualdad de condiciones con los demás rubros productivos, ya que dicha actividad ha sido subsidiada permanentemente por la sociedad uruguaya en todas sus fases: campo, transporte e industria, y lamentablemente le seguiremos poniendo plata (la cual falta en muchos lados) para que continúe su feliz crecimiento”.

La visión del Ministerio de Ambiente

Blancos y colorados cuestionaron en la sesión de Diputados que el proyecto de ley había ingresado al Parlamento un mes antes. “Se pretende votar un proyecto de ley sin previo debate, sobre tablas, el último día del período legislativo, sin escuchar la opinión de los ministerios competentes”, dijo el colorado Felipe Schipani.

Este lunes, en el programa Desayunos informales de Teledoce, el viceministro de Ambiente, Gerardo Amarilla, dijo que no tuvieron posibilidad de participar en el debate: “Venimos trabajando para modificar los trámites que deben hacer las plantas forestales dentro del Ministerio de Ambiente, es decir que el ministerio interviene y analiza el impacto que puede tener la forestación en el suelo, en el agua y en la diversidad”.

Asimismo, dijo que se hacen estudios para restringir las propuestas de forestación en aquellas zonas que puedan verse afectadas, y que se busca tratar con mayores restricciones las zonas de cuencas menores para evitar que haya un porcentaje mayor de forestación y que afecte la calidad de las aguas.

Amarilla aclaró que se estaba trabajando sobre el tema “antes de que se planteara el proyecto”, pero “lamentablemente nosotros nunca fuimos escuchados”. Aseguró que el sector forestal “genera fuentes de empleos”, pero también “impactos y conflictos” y que por eso se busca “distribuir qué porcentaje de suelo se les dan a ciertos sectores”.

El viceministro subrayó: “A la hora de regular debemos trabajar en todos y no solamente poner foco en uno. Hay medidas restrictivas que hay que establecer, sí, pero que sea con bases científicas. Son temas interesantes de analizar y hay elementos que no deben ser dejados afuera, como ocurrió en este proyecto”.