Con el acento puesto en comenzar a gestar un vasto acuerdo comercial bilateral entre ambas naciones, ayer comenzó la visita oficial de dos días que el presidente estadounidense, Donald Trump, hará junto con su comitiva a India. Además, en la extensa agenda común, representantes de los países tratarán otros temas, como los derechos de propiedad intelectual, acuerdos de defensa y cooperación en temas relacionados con la energía nuclear.

En su primer acto público en India, Trump y su esposa Melania estuvieron en la ciudad de Ahmedabad, ubicada en el estado occidental de Gujarat, lugar natal del primer ministro Narendra Modi, y visitaron un lugar donde vivió durante varios años el líder histórico indio Mahatma Gandhi. Posteriormente, Trump y Modi se trasladaron al estadio de críquet Sardar Patel Gujarat, el más grande del mundo de este deporte de origen británico, donde fueron ovacionados por las 110.000 personas.

Ante la gigantesca audiencia, Trump –que goza de una peculiar popularidad en India– pronunció un discurso en el que, además de cometer varios errores al querer pronunciar palabras en el idioma hindi, anunció que quería estrechar los lazos comerciales con India, prometiendo “un increíble acuerdo comercial” y nuevas ventas de equipos militares. “A medida que continuamos desarrollando nuestra cooperación en defensa, Estados Unidos espera brindar a India algunos de los mejores y más temidos equipos militares del planeta”, dijo Trump. Horas más tarde, la delegación estadounidense que acompaña al mandatario confirmó que los dos países firmarán acuerdos para vender helicópteros militares por valor de 3.000 millones de dólares, lo que prácticamente convertirá a Estados Unidos en el principal socio de India en materia de defensa. El hecho es significativo, teniendo en cuenta las tiranteces que se han dado en los últimos años entre el gobierno estadounidense y el de Pakistán, el principal enemigo de India, de acuerdo con lo que consignó el portal France24.

Durante su discurso Trump recordó las profundas relaciones existentes entre ambos países y alabó a la nación que lo está recibiendo. “En sólo 70 años desde su independencia, India se ha convertido en un gigante económico y en la mayor democracia que jamás ha existido”, declaró Trump, quien además dedicó gratas palabras a Modi, un político conservador nacionalista que es primer ministro indio desde 2014, reelecto en los comicios del año pasado, y que se caracterizó por impulsar normas conservadoras que sus adversarios políticos denuncian como autoritarias y étnicamente divisivas. Una de ellas es la reciente aprobación de la llamada Ley de Enmienda de Ciudadanía, que es considerada discriminatoria hacia la comunidad musulmana que vive en India.

Tras su intervención junto con Modi en el estadio de críquet, Trump viajó a la ciudad de Agra para visitar el Taj Mahal y luego voló a Nueva Delhi, la capital del país, donde este martes centrará su agenda de trabajo en asuntos comerciales.