Este lunes se cumple el 40 aniversario de la fundación del Partido de los Trabajadores (PT) en Brasil en 1980, y la celebración fue el sábado, con el Festival PT 40, que contó con la presencia de su líder, el ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva, y el ex mandatario uruguayo José Mujica, considerado un líder por la izquierda regional.

Lula (74) y Mujica (84) llamaron a la renovación de la política por medio de los jóvenes, y señalaron que es fundamental su compromiso. “Yo les digo a los jóvenes: entren en la política. Si están desanimados hay muchas cosas para hacer”, aseguró Lula. “Si los jóvenes no se comprometen no avanzaremos”, agregó Mujica. El brasileño llamó al PT a hacer campañas para atraer a los jóvenes: “Quiero mostrarles a los jóvenes que sólo la política es capaz de ayudarnos a construir un país mejor”, dijo. Añadió que la política “es buena” y que si están en contra de lo que se hace actualmente, pueden levantarse y “asumir” la responsabilidad de hacer “lo que los otros no están haciendo”.

Lula se refirió puntualmente a la situación laboral de los jóvenes y criticó la flexiblización de las normas laborales y todas las prácticas de precarización que, considera, se ocultan detrás del concepto de “microemprendedores”. “La forma más degradante de trabajo la quieren esconder con el nombre de microemprendedor”, aseguró. “Todo lo que conquistamos en el siglo XX no los quitaron en nombre de la tal flexibilización. Yo quiero saber si es el mercado el que va a regir nuestras vidas o si el Estado finalmente va a intervenir para garantizar nuestros derechos”, agregó.

Por su parte, Mujica dijo que la política “es cariño y solidaridad” y que la invitación a los jóvenes es “a tener una vida comprometida con el amor a los otros, con luchar por un mundo un poco mejor”. “El mundo mejorará si los jóvenes se comprometen. Si son capaces de gastar parte del tiempo de su vida luchando por la justicia y la igualdad”, concluyó.

Ante cientos de personas presentes en las celebraciones, además de llamar a los jóvenes a sumarse a la política, Lula se jactó de la experiencia acumulada por él y Mujica, y no se refirió a la posibilidad de dejar el liderazgo del PT. “Ambos hicimos muchas cosas por América Latina y esa experiencia es la que vamos a contar, pero vamos a mostrar que envejecer no significa nada, tan sólo acumular experiencia que podemos transmitir”, afirmó.

Críticas internas

En el festejo no estuvo presente el histórico líder del PT Tarso Genro, quien dirige un sector del partido que no está del todo alineado con el diagnóstico que hace la corriente mayoritaria, dirigida por Lula. En su discurso, el ex presidente brasileño le restó importancia a la posibilidad de que el PT haga una autocrítica y apuntó que nunca se le exigió a la derecha que lo haga. En la vereda contraria, Genro advierte, al menos desde la reelección de Dilma Rousseff en 2014, que el PT debería revaluar su política de alianzas, que sus propios líderes evitan la renovación generacional y que deben retomar el contacto con sus bases militantes. “Tenemos un discurso y un programa anclados en la época en la que el partido fue fundado”, y no hay una preocupación por reflejar y atender las transformaciones sociales, aseguró.