La 25ª edición de la Marcha del Silencio, que se conmemoró este miércoles, fue la primera en la historia en realizarse de forma virtual, debido a la pandemia del nuevo coronavirus que afecta al país desde mediados de marzo. La tradicional movilización, organizada por la Asociación de Madres y Familiares de Uruguayos Detenidos Desaparecidos, se centralizó en un video difundido por la organización en los medios públicos a las 19.00, en el que se vieron las fotos y nombres de las 197 personas detenidas desaparecidas. Asimismo, desde hace días se replicaron en Montevideo y el interior distintas intervenciones, como balconeras y fotografías que se multiplicaron en las calles.

Para Óscar Urtasun, hermano de José Luis Urtasun, detenido desaparecido en 1978, el cambio de formato no menoscabó el espíritu de la movilización que se lleva a cabo desde 1996. Por el contrario, considera que la amplia adhesión, demostrada en las redes sociales y que él percibió en un “amplio recorrido” que hizo por la capital, es una señal “alentadora”. “Fue un día impresionante, fue algo impresionante. Fue tremendo. No me canso de repetir que la gente es la protagonista; la gente, los grupos de apoyo, la prensa. La gente que siente el problema como propio. Es alentador”, expresó en diálogo con la diaria. “Estuvo buenísimo en el sentido de cómo se proyecta el tema en la sociedad: por más que pasen años, estas cosas duelen y ese dolor engrandece”, reflexionó.

Oscar Urtasun y una foto de su hermano detenido desaparecido, José Luis Urtasun.

Oscar Urtasun y una foto de su hermano detenido desaparecido, José Luis Urtasun.

Foto: Mariana Greif

Urtasun ve con optimismo cómo se está dando el traspaso de la lucha por verdad y justicia hacia los más jóvenes, a medida que se produce el recambio generacional. Señala que se aprendió “mucho de las viejas queridas” y menciona a Luz Ibarburu, Violeta Malugani y Luisa Cuesta, así como de los desaparecidos. “¿Quién no podía crecer en ese entorno? Si no crecías era porque no querías. La verdad es que aprendimos mucho de ellos”, asegura. Y afirma que ahora “los jóvenes tienen que hacer su gol”.

“Es una cosa nacional esto, es continental. Muchos se van a quedar en la indiferencia pero muchos van a salir a cambiar la historia. Hay que esperarlos, hay que ayudarlos, hay que estar atentos cuando precisen una idea o un poco de historia. La vida sigue y tenemos que ser optimistas, tenemos que decir sí, se puede. Porque si no hacemos nada, después nos va a morder el bicho de la conciencia, que es durísimo”, afirmó. Asimismo, propuso “ayudar” a los jóvenes a encauzar la lucha en el marco de un nuevo período de gobierno: “Este gobierno está dispuesto a generar todo para las clases que no son las nuestras”, es decir, “las clases baja y media”, sostuvo. En ese sentido, señaló que “a los jóvenes hay que ayudarlos en que hay un contenido de clase y un contenido histórico y del pasado”.