“Inefop no será más un financiador generoso, que paga pero opina poco y controla menos”, anunció el nuevo director general del Instituto Nacional de Empleo y Formación Profesional (Inefop), Pablo Darscht, este martes durante la presentación formal del nuevo consejo directivo del organismo. Darscht destacó que el cambio de autoridades se produce “en un momento particularísimo” de la institución, con un “nivel mínimo” de reservas financieras en el instituto, y con el país en medio de un “período de estancamiento de varios años” y de la emergencia sanitaria. Además, destacó la existencia de cambios a nivel global debido a la revolución tecnológica.

Darscht, doctor en Ingeniería y perteneciente al Partido Independiente, señaló que Inefop “ha crecido vertiginosamente en el último lustro, dejando en niveles mínimos las reservas financieras que se habían acumulado en el Fondo de Reconversión Laboral [FRL]”, ya que “buena parte de esas menguadas reservas” se destinaron al Fondo Coronavirus para paliar las consecuencias de la pandemia. “Desde el punto de vista del país, transitamos por un período de estancamiento de varios años, que provocó tres ‘estadios Centenarios’ repletos de desocupados en febrero, a lo que se sumó el golpe de la covid-19, que hasta ahora ha provocado que tres estadios más, igualmente llenos, debieran solicitar seguro de desempleo”, indicó.

En cuanto al desarrollo tecnológico, el titular de Inefop destacó que “estamos transitando por años de cambios radicales en el mundo del trabajo, una verdadera revolución en la que vemos mutar aceleradamente los empleos y las competencias que se requieren para desempeñarlos”. “A las circunstancias inéditas se las supera con soluciones originales”, continuó el jerarca, que propuso llevar adelante una “metódica innovación continua”, con “objetivos claros” y en busca de “aprender del impacto que efectivamente estamos teniendo”. “Debemos comprometernos con estándares de calidad y efectividad, y su revisión periódica y objetiva”, insistió. Asimismo, aseguró que en los dos meses que el nuevo equipo lleva trabajando ya se ha avanzado en varias líneas de trabajo, enfocadas en crear “mecanismos innovadores de orientación profesional” para la población afectada por la crisis actual.

Julio Perdigón, representante del PIT-CNT en el directorio de Inefop desde 2015, señaló que desde su creación en 2011 “el instituto ha invertido mucho más de lo que ha recaudado”, aunque apuntó que “algunos entienden que esto es un gasto”, pero para la central sindical es una “inversión”. “El instituto no es un banco. Está al servicio de las personas, de las empresas y del sector productivo. Por lo tanto, cualquier acción que realicemos no se puede medir como si fuera una institución bancaria”, observó. “Sería muy promiscuo que el instituto tuviera millones de dólares en el banco y hubiera necesidades en la educación o en otros sectores”, agregó.

Al respecto, Darscht sostuvo que es necesario hacer una evaluación -aunque no sobre “cómo la haría un banco”- y anunció que se recuperará “la figura del auditor interno, hoy inexistente”, y se hará de la transparencia “un valor básico”. “En un escenario de recursos escasos, es clave que cada peso que el instituto invierta sea para conseguir un resultado que se pueda medir y evaluar”, enfatizó. En la misma línea, el representante de la Cámara de Industrias del Uruguay en el directorio, Gerardo Garbarino, aseguró que “la intención de todo el consejo y particularmente del sector empresarial es que las respuestas se encaminen de una manera no sólo cuantitativa sino también cualitativa”. “Tenemos que adaptarnos a la actual situación, al futuro del trabajo, y agregarle como algo permanente la medición del impacto, de la pertinencia y de la calidad”, coincidió.

Durante su oratoria, Perdigón y Garbarino hicieron referencia a la deuda del Estado con la Ley 18.406, que creó el instituto y que encomienda al Poder Ejecutivo la asignación de partidas mediante leyes presupuestales o de rendición de cuentas. En ese sentido, Garbarino señaló que Inefop “es un organismo tripartito pero con fondos bipartitos”, y Perdigón reclamó por “la deuda económica y moral que tiene el Poder Ejecutivo”. “El Estado no puede estar por fuera del empleo y la formación profesional; tiene que ser parte y tiene que contribuir”, expresó.

El ministro de Trabajo y Seguridad Social, Pablo Mieres, asumió el reclamo. “Heredamos una deuda muy grande en el aporte de fondos a Inefop, que asumimos y que tenemos que ver cómo resolvemos”, aseguró. Afirmó, asimismo, que la institución “es un instrumento crucial para enfrentar uno de los más importantes y graves problemas que tiene nuestro país por delante, que es la crisis del empleo, que ya venía siendo un problema” antes de la emergencia sanitaria. “Obviamente, todo lo que ha ocurrido desde entonces y el impacto de la emergencia sanitaria multiplican la preocupación y, por lo tanto, la importancia de dar una respuesta desde el gobierno”, continuó.

En el acto de este martes también asumieron formalmente en el consejo directivo Guillermo Dutra como representante del Ministerio de Educación y Cultura; Pablo Puppo, de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto; Eduardo Ameglio, de la Cámara Nacional de Comercio y Servicios, y Alicia Maneiro, de la Confederación Uruguaya de Entidades Cooperativas.