Las investigaciones sobre el espionaje ilegal a dirigentes y periodistas durante el macrismo avanza en Argentina, y surgen nuevas sospechas así como iniciativas para abordarlas.
En la Legislatura porteña, el parlamento de la ciudad de Buenos Aires, la diputada del Frente de Todos Victoria Montenegro propuso la creación de una comisión para indagar si el gobierno local tuvo alguna responsabilidad en esas acciones. Si su propuesta se aprueba, se investigaría en ese ámbito si en el espionaje estuvieron involucrados el jefe de la Policía local, Gabriel Berard, los integrantes del gabinete y el propio jefe de gobierno, Horacio Rodríguez Larreta.
“Ante hechos de tanta gravedad institucional como significa que miembros de la Policía de la ciudad vayan a la AFI [Agencia Federal de Inteligencia] para hacer espionaje ilegal, entendemos que hay responsabilidades y queremos saber quiénes son esos responsables. El objetivo es que esto no pase más, que no haya que seguir padeciendo este tipo de situaciones”, dijo Montenegro, según informó el diario Tiempo Argentino. La legisladora ya había denunciado en noviembre que integrantes de la Policía porteña habían estado presentes en la AFI.
Una comisión bicameral ya investiga el caso en el Congreso argentino. Entre los funcionarios vinculados con el ex presidente Mauricio Macri que son indagados en este ámbito aparece la ex secretaria de Documentación de la Casa Rosada, Susana Martinengo. Según informó el periódico argentino, una de las sospechas que recaen sobre ella es la de que infiltró a un “cartonero trucho” entre los recicladores de la ciudad. El espía, según los indicios que encontró la comisión, tenía la tarea de organizar un sindicato y vincular al oficialismo con los barrios más pobres de la ciudad.