El proyecto presupuestario del gobierno propone que los presidentes de las empresas públicas cobren un salario equivalente al 85% del sueldo de un ministro, lo que implica casi una duplicación de la remuneración actual. Consultada al respecto en Telenoche, la ministra de Economía y Finanzas, Azucena Arbeleche, dijo que se va a ahorrar “por muchos otros lugares” y para esos cargos se necesita “a las mejores personas, para que se pongan al frente y gestionen de otra manera”.

Esta modificación legal hace que la retribución de los jerarcas de empresas públicas pase de unos 120.000 a unos 235.000 pesos. El secretario general de la Confederación de Organizaciones de Funcionarios del Estado (COFE), Joselo López, dijo a la diaria que esta medida es “un disparate”, porque si bien es partidario “de siempre equiparar para arriba, es un contrasentido que mientras el resto de los trabajadores tienen una rebaja a un jerarca se le incremente casi 100%”.

Además de esto, el presupuesto contiene otras disposiciones sobre las compañías del Estado y también las subsidiarias que funcionan bajo el derecho privado. En el mensaje que acompaña el articulado se menciona el objetivo de “modernizar la gestión de los entes autónomos y servicios descentralizados, así como de sus subsidiarias, aplicando mejores prácticas, fortaleciendo el gobierno corporativo y haciendo más transparente la información”.

En ese sentido, las empresas públicas “deberán formular sus presupuestos de forma tal de cumplir con estándares mínimos de retorno sobre su patrimonio”, y la OPP fijará un umbral mínimo de rendimiento en cada ejercicio. “En ningún caso el retorno podrá ser inferior al costo promedio de la deuda pública del Estado”, dice el artículo 682.

A su vez, se plantea una reducción de los montos de donaciones de los entes: no podrán ser superiores al 0,1% de los ingresos brutos o al 3% de las utilidades netas —se tomará como referencia el menor de estos números—, ni individualmente superar las 100.000 Unidades Indexadas (unos 469.000 pesos).

Respecto a las subsidiarias, un artículo del presupuesto establece que las personas que presten servicios en ellas no podrán cobrar más que el sueldo de un subsecretario de Estado. Esto regirá desde la aprobación de la ley, excepto para los directores de estas empresas, a los que se aplicará el nuevo criterio al renovar sus contratos.