El presidente venezolano, Nicolás Maduro, y varios de los ministros más importantes que integran su Ejecutivo están vinculados con posibles “crímenes de lesa humanidad”, según informó una misión de expertos independientes comisionada por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) al presentar un informe que recaba el uso sistemático de la tortura y las ejecuciones extrajudiciales en la nación bolivariana.

“La misión encontró motivos razonables para creer que las autoridades y las fuerzas de seguridad venezolanas han planificado y ejecutado desde 2014 graves violaciones a los derechos humanos, algunas de las cuales –incluidas las ejecuciones arbitrarias y el uso sistemático de la tortura– constituyen crímenes de lesa humanidad”, dijo la presidenta del grupo de expertos, la portuguesa Marta Valiñas, abogada especializada en derechos humanos, citada en un comunicado consignado por agencias internacionales. Valiñas agregó que “lejos de ser actos aislados, estos crímenes se coordinaron y cometieron de conformidad con las políticas del Estado, con el conocimiento o el apoyo directo de los comandantes y los altos funcionarios del gobierno”.

En julio, la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, la ex presidenta chilena Michelle Bachelet, criticó la situación que se vivía en Venezuela al presentar un informe en el que denunciaba “detenciones arbitrarias, violaciones a las garantías al debido proceso” y casos de “tortura y desapariciones forzadas”.

En esta ocasión, la Misión Internacional Independiente de determinación de los hechos de la ONU sobre Venezuela investigó 223 casos, 48 de los cuales se examinaron en profundidad y fueron presentados en un informe de 443 páginas. Además, los representantes de la ONU estudiaron otros 2.891 casos para “corroborar los patrones de violaciones y crímenes” como ejecuciones extrajudiciales, desapariciones forzadas, detenciones arbitrarias y tortura.

Los contenidos del informe fueron rechazados en forma contundente por el canciller venezolano, Jorge Arreaza, por considerar que el reporte de la misión de la ONU está “plagado de falsedades” y no posee “rigor metodológico alguno”.

Según comentó Arreaza en su cuenta de la red social Twitter, la comisión que redactó el documento “a distancia” es controlada por “gobiernos subordinados a Washington” que, a su juicio, ejercen la “práctica perversa de hacer política con los derechos humanos” para agredir a la nación. “Un informe plagado de falsedades, elaborado a distancia, sin rigor metodológico alguno, por una misión fantasma dirigida contra Venezuela y controlada por gobiernos subordinados a Washington, ilustra la práctica perversa de hacer política con los derechos humanos y no política de derechos humanos”, afirmó el jefe de la diplomacia venezolana.