A través de un comunicado publicado este martes, Beraca, la organización religiosa liderada por el pastor Jorge Márquez, se expresó tras el pedido de informes cursado por la bancada de diputados de la lista 1001, en el que se le preguntaba al Ministerio de Defensa si dicha iglesia tenía la autorización correspondiente para realizar un campamento que anunciaba la realización de un adoctrinamiento militar para entrar en el “ejército de Dios”.

“En resumen, del 9 al 13 de febrero, desarrollaremos nuestro plan, convocando a los jóvenes para alistarse en el ejército de Dios, que tiene armas; las cuales son el amor, la misericordia, la FE, la oración y la Biblia”, sentencia el comunicado, firmado por la “comisión de jóvenes organizadores” del campamento.

Los integrantes de esta comisión se definen como “jóvenes cristianos” y recuerdan que “anualmente organizamos el Campamento Beraca, un evento juvenil internacional donde miles de chicos han vivido una semana inolvidable”, que apunta a “enriquecer su vida espiritual”.

“Durante el campamento lo que buscamos es reforzar enseñanzas que se fundamentan en principios y valores bíblicos, que nos lleven a construir una sociedad donde el amor, el respeto e igualdad de oportunidades, sean pilares que rijan el comportamiento de los ciudadanos”, dicen los jóvenes, que además aseguran que otro de los objetivos es anular “las prácticas como las que hoy nos acusan y señalan, sin tener ningún tipo de argumento válido, ni lógico”.

Los firmantes aseguran creer “en la prédica, pero más aún, en la práctica del respeto y el amor. Entre quienes podamos coincidir, pero también con aquellos que no logremos ponernos de acuerdo en función de nuestras creencias”. A su vez, dicen defender la “libertad de culto, que tanto nos costó conseguir desde el primer siglo de la era cristiana, cuando las autoridades asesinaban a nuestros hermanos por predicar el evangelio y reunirse para adorar a Dios”. “Defendemos esa libertad que algunos grupos no toleran y, por tanto, salen a descalificarnos”, aseguran.

Finalmente, los organizadores dicen que lo que buscaban con las “imágenes” que subieron a las redes sociales “era justamente lo que sucedió”.