La última versión del plan de vacunación del Ministerio de Salud Pública (MSP) es del 22 diciembre y tal como explicó este martes en conferencia de prensa el titular de la cartera, Daniel Salinas, se divide en tres etapas.

En el documento del MSP, que divulgó este martes El Observador, se establece que en un primer escenario se piensa llegar a 600.000 personas con 1.200.000 dosis de vacunas. En esta primera etapa se vacunará al personal de la salud, a los trabajadores esenciales y a los adultos mayores de 65 años, con el objetivo de garantizar la atención médica y sanitaria y disminuir la mortalidad por covid-19.

El segundo escenario plantea alcanzar a 1,5 millones de personas con tres millones de dosis. La población objetivo de este escenario son otros trabajadores esenciales y la población de 45 a 65 años. Con esto se busca disminuir la transmisibilidad y no afectar el funcionamiento de servicios.

Esta etapa se divide en tres fases; en la primera, se pretende vacunar al personal docente y del transporte, unas 400.000 personas; en la segunda se alcanzará a aquellas personas con dos o más comorbilidades, unas 300.000 personas; y en la última fase, a las personas con discapacidad y a los privados de libertad -entre ambos grupos estiman unas 200.000 personas-.

El tercer y último escenario implica vacunar a la población en general de entre 15 y 45 años, con el objetivo de disminuir la transmisibilidad. Se alcanzaría a 2.836.280 personas con 5.672.560 dosis. En esta etapa se comenzará con las personas de entre 35 y 44 años, y se seguirá priorizando a docentes, personal del transporte y personas con dos o más comorbilidades.

La cantidad de vacunas necesarias y su distribución

Según detalla el informe, el mecanismos Covax, de la Organización Mundial de la Salud, del que participa Uruguay, permite asegurar la compra de vacunas para llegar a 750.000 personas; sin embargo, se espera que en las reuniones bilaterales con laboratorios privados se llegue a 1.500.000 personas y con eso alcanzar a 40% de la población.

Según el plan, tanto el almacenamiento como la distribución van a estar a cargo del laboratorio Clamette, tal como sucede con el resto de las vacunas del esquema regular. De todas formas, se aclara que se evalúan propuestas complementarias de apoyo, como las que puede otorgar el Ministerio de Defensa Nacional.

Se espera llegar a las 80.000 dosis semanales. En la primera etapa se buscará que los prestadores de salud vacunen a sus propios trabajadores, y durante las demás fases se realizará vacunación por agenda, aunque no se descartan otras estrategias de vacunación para determinadas poblaciones.

Basados en la campaña antigripal

Este miércoles en rueda de prensa el subsecretario de Salud Pública, José Luis Satdjian, dijo que buena parte de la estrategia de vacunación contra el coronavirus se basó en la que se hizo contra la gripe. “La pandemia ha traído varias complicaciones y se requiere una vacunación masiva, progresiva y ordenada, eso es importante”, por esto van a retomar una de las claves del éxito de la campaña antigripal: la agenda web y telefónica. Según Satdjian, el equipo del MSP trabaja desde agosto para llegar a duplicar la capacidad de vacunación que tuvo la estrategia contra la gripe.

Para el viceministro “el plan está pronto” a pesar de que no se sepa qué vacuna se va a usar aún: “la vacuna que llegue va a ser la estrategia que se use, pero el plan es el que se presentó”. De todas formas subrayó que Uruguay va a tener “capacidad de suministro a lo largo y ancho del país, con más vacunatorios, con mayor horario de atención, con la agenda ordenada y la cantidad de personas establecidas”.