El director nacional de Telecomunicaciones, Guzmán Acosta y Lara, dijo a la diaria que se busca dejar operativa la portabilidad numérica este año “antes de las fiestas”. Explicó que, en general, las empresas de telefonía móvil “no hacen cambios en la red” a partir de mediados de diciembre “para que no haya problemas con los mensajes ni llamadas”, que aumentan por las celebraciones de Navidad y fin de año. Por este motivo es el que el gobierno pretende terminar antes de esa fecha el proceso de preparación del sistema creado a partir de la ley de urgente consideración (LUC) y ponerlo en funcionamiento.
La portabilidad numérica fue establecida por la LUC y prevé que los clientes de una compañía telefónica puedan cambiarse de empresa manteniendo su número. Para esto es necesaria una serie de cambios a nivel de la operativa del sector, proceso que ya comenzó hace unos meses y dirige el Comité de Portabilidad Numérica.
Como los artículos de la LUC que habilitaron este mecanismo están dentro de los impugnados, el Frente Amplio y el sindicato de Antel solicitaron frenar el proceso hasta conocer el resultado del referéndum. El gobierno agregó en los contratos a firmar con el consorcio que administrará la base de datos una cláusula que exime al Estado de toda responsabilidad jurídica si eso ocurre.
Según informó Canal 5, el presidente de Antel, Gabriel Gurméndez, había informado que la portabilidad numérica se aplicaría desde el 27 de diciembre.
El director vocal de la empresa estatal en representación del FA, Daniel Larrosa, utilizó su cuenta de Twitter para cuestionar la puesta en marcha del sistema a pocos meses de que se someta a referéndum.
“Millones de dólares se están gastando en este instrumento obsoleto y no se sabe si finalmente la normativa mantendrá su vigencia”, criticó, y luego agregó: “Deploramos que desde el seno del propio Antel se festejen cambios normativos que perjudican los ingresos de la empresa pública y que favorecen a las multinacionales. Estudios existentes dan cuenta de una pérdida anual mayor a 30 millones de dólares”.