El senador Guido Manini Ríos participó este miércoles de noche de un space de Twitter organizado por el grupo Orientales del Twitter. Allí evaluó la campaña a favor de la ley de urgente consideración (LUC) que lleva adelante la coalición y adelantó el contenido de una pauta publicitaria que se lanzará cuando la Corte Electoral proclame que se alcanzaron las firmas para convocar el referéndum. También habló de la estrategia comunicacional de apelar a lo racional pero sobre todo a lo emotivo, en particular cerca de la votación, con mensajes como el siguiente: “Usted vote Sí y después no se queje”.

El líder de Cabildo Abierto (CA) manifestó que, a su juicio, “ha habido pasividad” por parte de la coalición respecto a la campaña para defender la LUC, sobre todo en el proceso de recolección de firmas. “Se pensó hasta último momento que las firmas no se iban a juntar y que lo mejor era no establecer polémica ni hablar del tema. Tal vez haya sido un grave error, yo creo que finalmente fue un error porque las firmas se juntaron, pero ahora viene esta nueva etapa”, sostuvo.

Para esta etapa, agregó, “hay una estrategia” y contó que una vez que se proclame que se alcanzaron las firmas para someter a referéndum la LUC, se lanzará una campaña publicitaria masiva, sobre la base de algunas consignas como: “No permitas que nos quiten nuestras libertades. No permitas que nos cercenen nuestros derechos”. Según dijo, el objetivo es que no quede “nadie sin haberla visto” y manifestó que también se difundirán spots sobre los distintos temas que abordan los artículos que se pretende anular.

Manini Ríos sostuvo que la campaña a favor del Sí planteará que lo que el “gobierno dice está mal, el gobierno es insensible, es neoliberal, vote Sí para frenar a este gobierno, para terminar con estas medidas que están vendiendo al país, que nos van a hacer trabajar más, nos van a pagar menos”.

Consultado sobre cuál sería la estrategia para combatir ese relato, el senador manifestó que con la campaña publicitaria “se va a buscar tocar lo emotivo”. Resaltó que hay temas que “son muy sensibles”, como la seguridad, “una de las grandes razones por las cuales la gente cambió la coalición que estaba en el gobierno”. Para Manini, unos meses antes de las elecciones nacionales “no era tan claro” que perdería el Frente Amplio. “Se cambió [el gobierno] por la gran inseguridad reinante en el país y ahí no sólo estuvo el porcentaje que votó a la coalición, sino también muchos de los frenteamplistas que estaban hartos de que todos los días estén matando a un vecino o a alguien, de que estén a los tiros en los barrios”.

“Si bien esa realidad no se ha solucionado y todos sabemos que sigue habiendo problemas de seguridad, la LUC da ciertas herramientas”, apuntó y dijo que hay que decirles a esas personas: “¿Entonces de qué se quejaban hace dos años? ¿Ustedes se quejaban de la inseguridad y ahora van a ir en contra de las medidas que ayudan a que haya más seguridad? Le estamos sacando potestades a la Policía: vuelve a no poder exigir la documentación a alguien en actitud sospechosa, vuelve a ser apedreada al entrar a un barrio y se tiene que ir ominosamente sin poder proceder porque termina el policía preso, vuelve a tener miedo de sacar su arma, el dueño de casa vuelve a tener impedimentos de defender su casa como lo habilita la LUC”.

Según dijo, se trata de un tema “racional”, que también “toca lo emotivo” y sostuvo que hay que decirle a la gente: “usted vote Sí y después no se queje”. “En definitiva eso es lo que vamos a terminar diciendo los últimos días previo al referéndum: ‘usted después no se queje si gana el Sí’”.

Manini manifestó que es necesario informar “de todas las cosas que van a caer y que van en contra de la gente” y “tocarle el razonamiento pero también el corazón”. Si se le quitan las “posibilidades a la Policía de ejercer su autoridad con eficiencia (…) después no se queje más cuando le maten al vecino, al hijo, que no se queje. Es lo que habría que decir”, apuntó. El senador aclaró que no sabe si llegarán a ese tipo de discursos, aunque adelantó que “tal vez haya que llegar [a eso] una semana antes de la elección”.