El presidente de la República, Luis Lacalle Pou, negó este miércoles, en una entrevista con Telenoche, de Canal 4, que exista un estado de “crispación”. “Creo que ahora no hay crispación, capaz que a alguno le sirve dar manija”, afirmó, y sostuvo que es prudente y que no tiene una postura de “ir a los extremos”.

El mandatario habló del proceder de la Guardia Republicana, que este miércoles detuvo a trabajadores del sindicato del transporte de carga que se manifestaban sentados bloqueando uno de los ingresos al puerto. Apuntó que el conflicto se produjo porque había trabajadores que querían trabajar y no podían por el bloqueo y, por lo tanto, su rol es “defender a los dos, por eso es difícil gobernar”. “Que protesten con sus pancartas, pero cortar el ingreso a un trabajador que quiere hacer su jornal, no”, agregó

“No entró ningún policía con un palo a sacar gente. Pero yo lo vi en otros gobiernos, en el gobierno pasado”, dijo, y aseguró que “no vamos a actuar así, la Policía en uso de la fuerza legítima retiró a personas”. De todas formas, señaló que “como todo, tiene riesgos, pero todo está reglado”.

“Hay paros y reclamos que pueden ser legítimos, hay medidas que son demasiado extremas y que perjudican a una sociedad toda”, dijo. “Hay conflictos a los que no les entiendo la dimensión por los reclamos que se hacen. Por ejemplo, el de Ancap”, añadió.

Otros mercados

El mandatario también se refirió a la posibilidad de seguir avanzando en la firma de nuevos acuerdos comerciales. En ese sentido, sostuvo que el gobierno comenzó a explorar la firma de un Tratado de Libre Comercio con Turquía y que el foco del gobierno no está solamente en China, país con el que comenzó un estudio de prefactibilidad.

“Abrimos dos nuevas embajadas, en Armenia y en Turquía, y el planteo fue establecer más vínculos comerciales. Recibimos formalmente la posibilidad de comenzar un Tratado de Libre Comercio con Turquía”, adelantó.

También se refirió a su intención de flexibilizar el Mercosur, algo que no ha sido aprobado por el bloque, y sostuvo que “los tres gobiernos del Frente Amplio manifestaron su intención, pero nunca fueron a los bifes”. “Nosotros hicimos un planteo formal, primero en el pico a pico, en reuniones informales, y luego en reuniones entre cancilleres, con más formalidad. Lo mismo con las reuniones entre ministros de Economía”, señaló.

“Si hay algo que no es tibio es un veto”

Lacalle Pou sostuvo que cuando Cabildo Abierto anunció que presentaría el proyecto de ley forestal, él se comunicó con el líder del partido, Guido Manini Ríos, y le dijo: “Mire, general, con la misma libertad con la que usted presenta este proyecto de ley yo tengo la libertad de vetar este proyecto en el que no creo”.

Descartó que su accionar en torno al tema fuese tibio, algo que había sugerido Manini en un acto en Canelones: “Si hay algo que no es tibio es un veto”, sentenció Lacalle Pou, y afirmó: “Yo no soy radical, porque tengo la obligación de apegarme a mis principios, a mis valores y a la representación nacional. No puedo apelar a la Ámsterdam o a la Colombes. Yo soy la Olímpica, donde se junta el centro de la opinión pública”, opinó.