Si bien Cuba aún no comenzó el proceso de vacunación a su población contra la covid-19, se está esperando que culmine el proceso de cuatro vacunas propias que se están desarrollando en el país contra la enfermedad. Dos de ellas, Soberana 02 y Abdala, entrarán en fase 3 en marzo y de la primera ya se fabricaron 150.000 dosis.

Según informó el diario Granma, órgano de prensa del Partido Comunista cubano, ambas vacunas se están produciendo en el laboratorio estatal BioCubaFarma “de manera favorable”. A su vez, el director del Instituto Finlay, Vicente Pérez Bencomo, explicó en su cuenta de Twitter que ya cuentan con un lote de 150.000 dosis de Soberana 02 “que salió muy bien, un hito científico-técnico importante”, y que se utilizarán en los ensayos clínicos de fase 3, mientras se prepara un segundo lote.

El programa de inmunización cubano utiliza actualmente 13 vacunas, 11 de las cuales son elaboradas en el país.

El 31 de enero, el virólogo cubano Amílcar Pérez Riverol explicó a la cadena alemana Deutsche Welle que parte de los ensayos de fase 3 se llevarán a cabo en Irán, debido a la baja prevalencia del coronavirus en la isla.

Según los datos de la Universidad John Hopkins, en Cuba hay más de 4.800 casos activos, mientras que en Irán la cifra supera los 158.000.

Si bien en las últimas semanas se produjo un incremento de los casos en Cuba y esto coincidió con el descubrimiento de la cepa sudafricana en el país, la jefa del Centro de Investigación, Diagnóstico y Referencia del Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí, Guadalupe Guzmán Tirado, dijo a la Agencia Cubana de Noticias que las investigaciones realizadas al respecto avalan la idea de que el aumento está más relacionado con la disminución de las medidas de contención y aislamiento.

En cuanto a la técnica que se utilizó para su desarrollo, la vacuna Soberana 02 conjuga un toxoide tetánico con el dominio receptor obligatorio (RBD) de la proteína S del virus, que está en contacto con el receptor de la célula.

El principio es similar al de otra vacuna cubana, la Quimi-Hib, utilizada para combatir la bacteria Haemophilus influenzae tipo b (HIB), que provoca meningitis, epiglotitis y neumonía.

Soberana 02 y Abdala son las que están más avanzadas, pero en Cuba también se están desarrollando otras dos vacunas contra la covid-19, Soberana 01 y Mambisa.

La aprobación de todas las vacunas para su uso en la población cubana depende de lo que decida el Centro para el Control Estatal de Medicamentos, Equipos y Dispositivos Médicos, y posteriormente se irá por la certificación de la Organización Mundial de la Salud.