Pasaron sólo seis días desde que Facebook eliminó las noticias de Australia de su plataforma y escondió la información del resto del mundo a los usuarios residentes en ese país. Ahora, y tras la negativa del gobierno australiano a archivar su proyecto de ley para que los gigantes de internet paguen a los medios de comunicación, Facebook dio marcha atrás y devolvió las noticias a los australianos, pero con condiciones favorables a la empresa.
En un comunicado publicado el lunes de noche, el vicepresidente de Alianzas Globales con Medios de Comunicación de la compañía, Campbell Brown, dijo que se llegó a un acuerdo para que el gobierno acepte “una serie de cambios y garantías” al proyecto para “apoyar a los medios que escojamos, incluyendo a los más pequeños y locales”. “Como resultado de estos cambios, ahora podemos trabajar para impulsar nuestra inversión en el periodismo de interés público y restaurar las noticias en Facebook para los australianos en los próximos días”, explicó.
“Mirando al futuro, el gobierno aclaró que mantendremos la capacidad de decidir si las noticias aparecen en Facebook, lo que implica que no estaremos automáticamente obligados a una negociación compulsiva. Siempre fue nuestra intención apoyar al periodismo en Australia y en el resto del mundo, y seguiremos invirtiendo en noticias a nivel global y resistiendo los esfuerzos de conglomerados de medios por impulsar marcos regulatorios que no tomen en cuenta el verdadero valor de intercambio entre los medios y las plataformas como Facebook”, señala Campbell en su declaración.
El secretario del Tesoro de Australia, Josh Fryndenberg, anunció en las últimas horas en Twitter que Facebook llegó a una asociación comercial con el grupo Seven West Media, propietario de varios canales de televisión y medios escritos de la isla. En tanto, el ministro de Comunicaciones, Paul Fletcher, informó que esta semana el Código de Negociación de los Medios de Comunicación, como se denominó al proyecto, pase al Parlamento.
Seven West Media divulgó un comunicado el lunes en el que informa que se firmó una carta de intención con Facebook para proporcionar contenido informativo a la plataforma, sujeta a un acuerdo de largo plazo que se ejecutaría en los próximos 60 días.
El conglomerado australiano ya había firmado el 15 de febrero un acuerdo con Google, el otro gigante de internet que ha manifestado su rechazo al proyecto de ley en Australia.
Desde hace varios meses se discute en Australia un proyecto de ley que obliga a Google y Facebook a pagar a los medios locales por la información publicada en las plataformas, ya que consideran que estas se llevan la mayor parte del dinero en publicidad obtenida por los clics. En contrapartida, las empresas estadounidenses sostienen que son ellas las que llevan millones de lectores a los medios, que, como en el resto del mundo, atraviesan una grave crisis.
Hace un mes, Google primero y Facebook después amenazaron públicamente con quitar de sus búsquedas los sitios web de la prensa australiana si el proyecto de ley avanzaba, amenaza que el segundo terminó concretando el 17 de febrero. En ese momento, Fryndenberg dijo que la medida era “inútil y autoritaria” y que la reputación de Facebook se vería empañada por esa resolución. Asimismo, sostuvo que el gobierno australiano continuaba firme en su posición de que las plataformas paguen a la prensa.
Previamente, el gerente de Facebook para Australia y Nueva Zelanda, William Easton, afirmó en un comunicado que el proyecto de ley australiano “desafía la lógica” y que la comisión que lo elaboró “supone que Facebook se beneficia más en su relación con los editores, cuando en realidad ocurre lo contrario”. Al mismo tiempo, relativizó la importancia de las noticias, asegurando que “representan una fracción de lo que la gente ve y no es una fuente significativa de ingresos para nosotros”.