A 15 días de anunciar su salida del gobierno español, el líder izquierdista Pablo Iglesias participó en el último Consejo de Ministros como vicepresidente segundo y dejó el cargo para enfocarse de lleno en la carrera electoral por la Comunidad de Madrid. Con un video publicado en su cuenta de Twitter, indicó que dejaba su lugar a Yolanda Díaz, actual ministra de Trabajo y también integrante de la alianza Unidas Podemos, que gobierna junto con el Partido Socialista Obrero Español.
“Creo que hemos demostrado que, a pesar de todo, las cosas se podían hacer mejor, que a nosotros no se nos compra y que somos capaces de producir mejoras para la mayoría social de nuestra patria”, dijo Iglesias en el video, en el que también aseguró que “enfrente del gobierno hay oligarquías que ejercen su inmenso poder político, económico y mediático” que buscan defender “sus intereses y no los de la mayoría”. Dijo también que él será “más útil” como candidato a la presidencia de la Comunidad de Madrid.
Desde este miércoles hasta el 4 de mayo lo espera una campaña electoral que tiene como favorita a la actual presidenta de la comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, del Partido Popular (PP), que disolvió la Asamblea para llamar a elecciones luego de romper con sus socios de Ciudadanos. Las encuestas arrojan una victoria holgada del PP pero sin la mayoría necesaria de 68 escaños en el parlamento regional que les permita formar gobierno en solitario, por lo tanto, podría recurrir a un pacto con el ultraderechista Vox.
Es en este esquema que entra Iglesias, una figura que genera polarización en el voto español y cuyo objetivo es debilitar al PP para así buscar una alianza con el PSOE, Más Madrid y, quizá, Ciudadanos.
En el arranque de la campaña electoral, Iglesias ya tuvo un cruce con simpatizantes ultraderechistas. Durante una recorrida en el municipio de Coslada, seis manifestantes hicieron el saludo nazi y gritaron consignas en su contra. Iglesias se acercó a ellos y cruzaron algunas palabras que no se oyen en el video que circuló en redes sociales. Luego se aproximaron militantes de Unidas Podemos, al grito de “Sí se puede”, a reclamar a los ultraderechistas que se retiraran.
Manteros con Iglesias
El lunes se dio a conocer que Serigne Mbayé, el portavoz del Sindicato de Manteros de Madrid (vendedores ambulantes), integrará la lista de Unidas Podemos en las elecciones autonómicas. Pablo Iglesias lo anunció en sus redes sociales y felicitó a Mbayé por su “ejemplo” y “compromiso” en la lucha por los derechos de los inmigrantes en España.
Mbayé nació en Senegal y llegó a España en 2006, en una embarcación precaria. Trabajó como mantero, integra la Asociación de los Sin Papeles y forma parte de una cooperativa que posee un restaurante agroecológico en la capital española.
Unidas Podemos busca nombres independientes que formen parte de la sociedad civil para integrar la lista de Iglesias. Mbayé es el tercer independiente en sumarse, luego del docente Agustín Moreno y la activista contra los desalojos Alejandra Jacinto.
Tras enterarse de estas incorporaciones, Díaz Ayuso afirmó que la candidatura de Unidas Podemos está conformada por “manteros, okupas y agresores” y que la gente “normal y coherente que trabaja todos los días” no está de acuerdo con que “a los manteros se les premie con un escaño”. Agregó: “Madrid no es eso. Él ha bajado de los cielos para intentar aquí su proyecto político. Madrid es otra cosa y en los barrios, desde los más pudientes a los más pobres, la gente no le quiere porque no quieren vivir con esa confrontación ni odio. No les gusta que se pacte el futuro de los españoles con Bildu (partido independentista vasco) ni con golpistas”.
En la misma línea de confrontación que mantiene desde que anunció el llamado a elecciones anticipadas, la presidenta de Madrid dijo que su candidatura representa “un muro para él (por Iglesias) y para el socialismo”.