Más de 15 países europeos suspendieron momentáneamente la aplicación de la vacuna desarrollada por el laboratorio anglo-sueco Astrazeneca, entre ellos Alemania, Francia, España e Italia, y este martes la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés), ente regulador de la Unión Europea (UE), anunció que está investigando el tema y el jueves emitirá una recomendación. Las alarmas surgieron al sospechar que la vacuna podría tener relación con casos de trombosis y embolia reportados en varios países. La EMA comenzó una investigación para determinar si existe una relación causal entre la Astrazeneca y esos casos, aunque hasta el momento lo descartaron.

Según explicó este martes la irlandesa Emer Cooke, directora de la agencia, durante una conferencia de prensa, los casos de trombosis fueron detectados “en un pequeño número de personas” que recibieron la dosis, y las trombosis o embolias surgen de a miles anualmente por diversos motivos. Según Cooke, hasta el momento no parece haber más casos entre los vacunados respecto de la población en general.

“Seguimos convencidos de que los beneficios de esta vacuna superan los riesgos”, dijo Cooke, pero aseguró que la investigación no descarta ninguna hipótesis: se analiza que el problema esté en algunas partidas concretas de la vacuna o en el proceso de fabricación de las plantas europeas, y se estudia la información clínica general e individual de los casos reportados por los distintos países buscando entender si la vacuna afecta a algunas poblaciones en particular.

Hasta la semana pasada la agencia manejaba la cifra de 30 casos reportados después de haber aplicado 5.000.000 de dosis en la UE, pero la directora no actualizó cuántos casos hay actualmente. 

Con la suspensión de la aplicación de la vacuna, Alemania, España y Francia se sumaron a Suecia, Portugal, Eslovenia, Letonia, Chipre, Bulgaria, Tailandia, Italia, Dinamarca, Noruega, Islandia y Austria. Austria fue el primer país en detener la vacunación con Astrazeneca la semana pasada, por la sospecha de que la dosis hubiera causado embolia pulmonar a una persona y la muerte a otra persona diagnosticada de trombosis múltiple. 

La directora de la agencia reconoció que los países europeos “están claramente esperando nuestra opinión” y aseguró que el trabajo de investigación busca que “se mantenga la confianza sobre la base de una evaluación científica adecuada”.

Astrazeneca, por su parte, respondió que examinaron los datos de seguridad de más de 17 millones de personas que recibieron la vacuna en la UE y Reino Unido, de los que no surge “ninguna prueba de un riesgo mayor” de problemas de coagulación por la vacuna, y agregó que fueron registrados 37 informes de coágulos en sangre entre esas 17 millones de personas. “Esto es mucho más bajo de lo que se esperaría que ocurriera naturalmente en una población general de este tamaño y es similar en otras vacunas contra la covid-19 autorizadas”, comunicó la compañía anglo-sueca.

Este martes la Organización Mundial de la Salud (OMS) se pronunció nuevamente sobre este tema, y recomendó “que se continúe usando la vacuna de Astrazeneca para enfrentar la covid-19, mientras se investiga los casos presentados en Europa”. Esta vacuna es una de las distribuidas por la campaña de la OMS, Fondo Covax. 

En el comunicado recuerdan que hasta el momento la EMA no ha encontrado “una relación causal entre la vacunación y los trastornos de coagulación, los cuales pueden producirse por diferentes causas”.

También puntualizan que los dos lotes que se analizan “no se van a distribuir a través del mecanismo Covax, ya que las dosis destinadas para este son producidas en la República de Corea y en India”, y señalan que los sistemas de vigilancia de países de la región panamericana que están administrando Astrazeneca “no han reportado señales de alarma con respecto a la seguridad de esta vacuna”.

“Tomando en cuenta que los beneficios de la vacuna superan sus riesgos, la OPS/OMS recomienda que se continúe usando la vacuna de Astrazeneca para enfrentar la covid-19”, concluye la OMS, que añade que la información “es revisada de forma permanente y se comunicará conforme haya nueva evidencia de relevancia”.

En Uruguay

Está previsto que las vacunas de Astrazeneca lleguen a Uruguay a fines de abril, mediante el mecanismo Covax. “Esto nos va a permitir a nosotros, que vamos a recibir las vacunas un poco más tarde, ya saber qué pasó”, opinó María Moreno, integrante del grupo ad hoc de la Comisión Nacional Asesora de Vacunaciones que estudia las vacunas contra la covid-19. La investigadora universitaria ve como algo positivo esta “pausa” en la aplicación de las vacunas, en vez de una señal de alarma: “Es ver que se están controlando bien las vacunas”, opinó este martes en En Perspectiva. Consideró que los datos hasta el momento hablan de una “incidencia muy baja”: “Está bien la precaución, pero hay que evaluar el riesgo-beneficio en su contexto”, concluyó.