El Fondo Monetario Internacional (FMI) dijo que los países avanzados podrían utilizar los impuestos a la propiedad, la renta y la herencia para contar con más recursos para reducir las desigualdades profundizadas por la pandemia de coronavirus.

En un informe, el Monitor Fiscal del FMI señaló que las desigualdades preexistentes a la pandemia se profundizaron en el último año tanto en los países avanzados como en los de menos recursos. Esto ha impactado también en el acceso a la atención médica, la educación y la infraestructura, lo que puede causar que las brechas sociales se mantengan durante generaciones.

Para evitarlo, el FMI señala que la mayoría de los países podrían conseguir ingresos adicionales a través de un aumento de los impuestos a las personas de más recursos, entre ellos los dirigidos a los ingresos, las propiedades y las herencias. Además, sugiere aumentar la inversión en educación, salud y desarrollo de primera infancia, así como fortalecer las redes de seguridad social.

Nueva Zelanda aumentó el impuesto a los más ricos

En la línea de lo sugerido por el FMI, este viernes entró en vigor la decisión del gobierno de Jacinda Ardern de aumentar el salario mínimo y el impuesto que pagan las personas de mayores ingresos.

El nuevo salario mínimo por hora aumentó de 13,19 a 13,96 dólares, de acuerdo con el anuncio realizado el lunes. En cuanto al impuesto, la tasa máxima pasó de 33% a 39% para quienes ganen más de 125.000 dólares por año, alrededor del 2% de los neozelandeses.

Se estima que el aumento repercutirá en una recaudación adicional de unos 384 millones de dólares para el año 2021 y de 443 millones para 2024.