El presidente, Luis Lacalle Pou, aseguró en entrevista con Subrayado que el gobierno adoptó “24 medidas y media” de las “más, menos 27” que recomendó en febrero el Grupo Asesor Científico Honorario (GACH). Puntualizó que las que no se adoptaron son la restricción total de la circulación en la madrugada y la prohibición del traslado entre distintos departamentos -“no es posible”, consideró-. En tanto, dijo que se habría adoptado “a medias” la recomendación de habilitar bares y restaurantes únicamente para la entrega a domicilio, en una aparente referencia a que estos comercios sí tuvieron una restricción de horario.

En el documento difundido el 7 de febrero el GACH proponía medidas para la situación que se presentaba en ese momento -con 490 fallecimientos por coronavirus desde el comienzo de la pandemia- y para un empeoramiento de la situación -mayo terminó con 4.276-.

Además de las mencionadas por Lacalle Pou, hay otras medidas -de las más restrictivas- que no fueron adoptadas desde febrero por el Ejecutivo, como la suspensión de torneos deportivos profesionales y de eventos sociales, las restricciones más estrictas de ingreso al país, el límite de aforo en el transporte departamental y la imposición del teletrabajo en el sector privado no esencial.

Otra de las recomendaciones era la limitación del tiempo de atención al público en los comercios no esenciales. Esta medida fue implementada por algunos comercios (como los shopping) pero el gobierno únicamente dictaminó en marzo el cierre de los free shop, mientras la reducción de horario de bares y restaurantes regía desde antes.

En cuanto a las clases presenciales en educación inicial y primaria, el informe del GACH dice “considerar la suspensión de clases en educación inicial y primaria en períodos de corta duración”. Esta medida fue adoptada temporalmente por el gobierno, pero el regreso a clases en esos niveles se produjo antes de que se cumplieran los niveles recomendados para hacerlo en los distintos indicadores.

La defensa de la gestión de la pandemia

Al ser consultado sobre si las medidas han sido suficientes, Lacalle Pou volvió a defender la negativa del gobierno a adoptar restricciones más duras. “No creo que funcione un lockdown”, opinó antes de señalar que para enfrentar la pandemia “está bien comparar, porque hay gente que ha pasado antes algunas situaciones, pero no hay un modelo” a seguir.

Además, el mandatario reiteró que los CTI no llegaron a estar saturados y subrayó que hubo, en los últimos días, una reducción en las camas ocupadas por pacientes con covid-19.

En cambio, Lacalle Pou subrayó que la clave es “la vacunación masiva” y dijo que, “a mediados de julio tendríamos que tener aproximadamente dos millones de uruguayos con las dos dosis”. Anunció que desde este fin de semana los adolescentes de entre 12 y 17 años podrán agendarse para ser vacunados, ya que la Comisión Nacional Asesora de Vacunación recomendó este martes aplicar las dosis de Pfizer-Biontech a esta población. Después de eso, consideró, “vamos a tener una fuerte reducción de circulación del virus”.

El presidente también destacó las ayudas económicas y financieras que se han implementado desde el comienzo de la pandemia y consideró que el gobierno “ha sido equilibrado”. Al ser consultado sobre si se aumentaría el financiamiento del Fondo Covid-19 con aportes de otros sectores -en particular el agropecuario-, el mandatario respondió negativamente.

Por fuera del coronavirus

Sobre el cierre de la entrevista, Lacalle Pou fue consultado sobre si habrá un aumento en los combustibles: “Hubo un no aumento, tenemos que aumentar”, respondió.

Ante la pregunta sobre si todas las cajas serán incluidas en la reforma de la seguridad social, dijo que sí, porque si no sería “injusto”.

Por último, acerca de la pintada en una comisaría de la frase “Hay orden de no aflojar”, utilizada por el exministro del Interior Jorge Larrañaga, respondió: “No me parece bien. Sé que fue algo autoconvocado, sé quién lo escribió, fue una explosión de afecto y agradecimiento”.