En un pronunciamiento titulado “Nicaragua: en defensa de la soberanía nacional y el estado de derecho” que se hizo público el lunes, el Ejecutivo que preside Daniel Ortega defendió los arrestos de varios dirigentes opositores realizados en los últimos días y exigió la “no injerencia de cualquier gobierno extranjero” en sus asuntos internos.

Entre los políticos recientemente detenidos se encuentran Cristiana Chamorro, Arturo Cruz, Félix Madariaga y Juan Sebastián Chamorro García, todos ellos aspirantes a ser candidatos en las elecciones presidenciales que se celebrarán en el país centroamericano en noviembre, en las que Ortega, de 75 años, irá por su tercera reelección. Paralelamente, durante el fin de semana la Policía detuvo a varios disidentes sandinistas, entre ellos los exguerrilleros Dora María Téllez y Hugo Torres, y al exvicecanciller Víctor Hugo Tinoco, según informó la agencia de noticias Efe.

En el comunicado del Ejecutivo nicaragüense se afirmó que su nación no es “una amenaza para ningún país del mundo” y se exigió el cese de las sanciones internacionales, que en tiempos de pandemia “elevan su ilegalidad al nivel de crimen de lesa humanidad”.

El gobierno de Ortega se quejó de que “se está desarrollando un ataque implacable y sin precedentes en contra del pueblo y el gobierno de Nicaragua, impulsado por falsas narrativas propugnadas por medios de comunicación de la derecha”.

Por otro lado, el gobierno del Frente Sandinista de Liberación Nacional justificó los arrestos de los opositores. “Lo único que este grupo de usurpadores de la oposición tiene en común es su lealtad al gobierno de los Estados Unidos de América y el hecho de que, directamente o a través de sus respectivas ONG, han recibido millones de dólares en dinero del pueblo estadounidense”, se afirma. En el documento se pide también que no haya “interferencias” de ningún tipo en la investigación de estas personas, acusadas “por delitos de lavado de dinero, fraude, traición o conspiración sediciosa”.

Este comunicado fue divulgado desde Managua un día antes de que el Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) celebre una sesión virtual extraordinaria para “abordar la situación en Nicaragua”, a solicitud de los representantes de Brasil, Canadá, Chile, Costa Rica, Estados Unidos, Paraguay y Perú.

La semana pasada el secretario general de la OEA, Luis Almagro, pidió que se suspenda la participación de Nicaragua en el organismo por lo que consideró una “arremetida sin precedentes” del gobierno contra sus opositores. En una carta divulgada en su cuenta en Twitter, el excanciller uruguayo consideró que en Nicaragua se produjo una “alteración del orden constitucional” según estipula la Carta Democrática Interamericana, el instrumento regional de defensa de la institucionalidad.