Balas de goma y granadas de gas pimienta enviadas por el gobierno de Mauricio Macri a Bolivia después del golpe de Estado contra el presidente Evo Morales fueron encontradas en depósitos de la Policía de ese país, informó este miércoles el jefe de la fuerza de seguridad boliviana, Jhonny Aguilera.

“Se ha encontrado en depósitos de la Policía varios de estos pertrechos, granadas de gas, granadas de triple fragmentación, que forman parte de los elementos recibidos de la Argentina sin que hubiera algún respaldo, están los pertrechos mas no existe ningún documento”, dijo Aguilera, según citó el diario boliviano Los Tiempos. El funcionario comunicó que esos insumos contaban con una autorización de la Agencia Nacional de Materiales Controlados de Argentina emitida entre el 11 y el 12 de noviembre de 2019 a pedido de la Gendarmería, de acuerdo con Página 12.

El 10 de noviembre de 2019 Morales fue forzado a presentar su renuncia a la presidencia y dos días después fue reemplazado por la vía de los hechos por la parlamentaria opositora Jeanine Áñez. En la madrugada del 13 de noviembre, llegaron las armas desde Argentina, según las autoridades bolivianas.

Aguilera dijo también que en Bolivia se intenta reconstruir los hechos y llamar a declarar a los funcionarios que esa madrugada fueron al aeropuerto, donde personas con “uniforme militar entregaron este material sin ningún tipo de documentación a la Policía Boliviana”. Se presume que esa noche llegó un avión C-130 argentino con personal para custodiar la embajada. El diario argentino señaló que la ministra de Seguridad de Macri, Patricia Bullrich, envió policías que integraban el grupo Alacrán, que no utilizan armas antidisturbios, sino munición letal.

El envío de armas para reprimir a los manifestantes se conoció días atrás, cuando el canciller boliviano, Rogelio Mayta, informó sobre una carta en la que el entonces comandante de la Fuerza Aérea Boliviana, Jorge Terceros, le agradecía al embajador argentino, Normando Álvarez, por el envío de “material bélico de agentes químicos”. En dicho mensaje se menciona el envío de 40.000 balas antitumulto y dispositivos de gas pimienta, aunque los nuevos datos establecen que fueron 70.000.

De acuerdo con el diario boliviano La Razón, Álvarez dijo que “la embajada argentina no participó en nada en contra del gobierno de Evo”, aunque agregó: “Claro que siempre puede existir un circuito paralelo. Era un momento de anarquía e irregularidades”.

El funcionario expresó también que antes del golpe él había pedido al gobierno argentino que enviara funcionarios de la Gendarmería a Bolivia. “Había pedido un mes antes, frente a la conmoción que se percibía, seguridad, porque no la había ni en la Embajada ni en la residencia. Dos días después de la renuncia de Evo, llegó un comando de Gendarmería Nacional con armamento y chalecos antibalas”, agregó. Esos materiales se trasladaron a la embajada, dijo, y manifestó que desconoce cuántas cajas eran.

El exembajador había dicho que nunca recibió la carta de agradecimiento por las armas que difundió el gobierno boliviano, y Terceros niega haberla enviado. Álvarez dijo también que durante esa crisis protegió a varias personas vinculadas con el gobierno depuesto de Bolivia que estaban en riesgo por la violencia política, entre ellos a un hermano del vicepresidente de Morales, Álvaro García Linera.

Otros países investigados

Además de indagar el papel del gobierno de Macri en estos hechos, las autoridades bolivianas han denunciado el envío de armas para reprimir protestas de parte del gobierno del expresidente ecuatoriano Lenín Moreno. A su vez, el Parlamento boliviano se dispone a investigar si Brasil y Chile participaron en “reuniones previas” a las protestas de 2019 contra la reelección de Evo Morales que derivaron en el golpe.

Existen “sospechas” de que “también tendrían que ver Chile y Brasil”, dijo el presidente de la Cámara de Diputados de Bolivia, el oficialista Freddy Mamani, y está prevista la conformación de una “comisión mixta” de integrantes de las cámaras de Senadores y de Diputados para indagar al respecto. Según citó la agencia Efe, Mamani dijo que la participación de Argentina y Ecuador en el envío de insumos bélicos está “confirmada”.

Por su parte, el gobierno argentino denunció ante la Justicia a Macri, Bullrich, el excanciller Jorge Faurie, el excomandante de la Gendarmería Gerardo Otero y a otros funcionarios por contrabando agravado. Según una investigación administrativa del Ministerio de Seguridad, constan la salida del país de armas de fuego, chalecos antibalas, municiones, granadas de mano y spray de gas pimienta.

El propio Evo Morales dijo en una entrevista con la radio argentina El Destape que “Macri debe ser investigado y juzgado por su rol en el golpe. Si corresponde extraditarlo lo verá la Justicia. No puede haber más presidentes que apoyen golpes”.