Marco Algorta, de la firma Khiron Life Sciences, expresidente de la Cámara de Empresas de Cannabis Medicinal, aseguró este jueves que el nuevo decreto reglamentario de la Ley de Regulación y Control del Cannabis anunciado por el gobierno “es un paso adelante”, pero “de forma muy conservadora”. En la misma línea fue el exsecretario general de la Junta Nacional de Drogas (JND) Diego Olivera, quien dijo que el nuevo marco jurídico “es positivo”, pero afirmó que “Uruguay se está perdiendo la oportunidad de desarrollar un programa de cannabis medicinal con la mayor seguridad para los pacientes”.

En conferencia de prensa, el prosecretario de Presidencia, Rodrigo Ferrés, anunció el miércoles la firma de un nuevo decreto sobre la producción y la comercialización de cannabis medicinal. Entre otros ejemplos de lo que implica este nuevo decreto, dijo que “se facilitan mecanismos para obtener autorizaciones para la exportación tanto de materia prima como de productos semielaborados con cannabis, los cuales ya no requieren el procedimiento de registro ante el Ministerio de Salud Pública [MSP], como sucedía anteriormente”. Por otro lado, “se estableció que los licenciatarios pueden tercerizar algunas de las etapas de la cadena de producción”.

Consultado por la diaria, Algorta manifestó que entre los principales cambios figuran algunas nuevas definiciones sobre qué es la materia prima de cannabis y qué es un producto semielaborado. Además, destacó que para “la exportación y la importación” de materias primas y productos semielaborados habrá mayores facilidades, porque se eliminó la obligatoriedad del registro ante el MSP. “Ese siempre fue un punto clave, porque es muy difícil registrar las cosas en el MSP, porque ellos se basan en farmacopeas que no incluyen al cannabis como una planta de uso tradicional en salud”, explicó.

Por otro lado, dijo que “hay una pequeña flexibilización” en trámites ante la Secretaría Nacional para la Lucha contra el Lavado de Activos y el Financiamiento del Terrorismo. También se refirió a un avance en “el tema de las investigaciones científicas”, que “ya no necesitan algún tipo de autorización del MSP”.

El representante de la industria del cannabis medicinal dijo que con esto las empresas ganarán “tiempo”, por lo que “es un paso importante”, pero “el partido se va a jugar en la regulación de la Ley 19.847”, del año 2019, que declara “de interés público las acciones tendientes a proteger, promover y mejorar la salud pública” mediante productos basados en cannabis, así como “el asesoramiento médico e información sobre beneficios y riesgos de su uso”.

Con el decreto anunciado por el gobierno “estamos mejor que antes”, pero la “gran preocupación” es que “tanto en Brasil como en Argentina” hay proyectos de ley “que son mucho más ágiles que lo que permite este decreto”, evaluó Algorta. “No es un decreto que nos pueda proyectar a largo plazo ni nada por el estilo”, subrayó.

Manifestó que estos países “parecen estar caminando a una mayor velocidad”, pese a que “Uruguay está más adelante en su posición”. “Lo que está mostrando [Uruguay] es que sigue caminando, pero a un paso más lento de lo que parecen venir otros competidores regionales, que pueden llegar a ocupar los espacios que Uruguay no está aprovechando en este momento en el mercado del cannabis”.

“Uruguay no termina de abrazar la oportunidad cannábica con este decreto”, ya que esta reglamentación tiende a facilitar la tarea de las empresas, pero “a nivel pacientes” no implica avances, sostuvo Algorta. Por todo esto, expresó que “es un decreto que va para adelante, pero de forma muy conservadora”.

“Al paciente uruguayo no le cambia nada”

Por su parte, Olivera dijo que la nueva reglamentación “establece un carril específico para la exportación de materias primas o productos semielaborados a partir del cannabis, que eso no existía en la normativa anterior”. “Es positivo, diversifica las posibilidades de la industria”, indicó el exjerarca.

No obstante, Olivera también criticó la falta de reglamentación de la ley de acceso al cannabis por temas de salud aprobada en 2019. “Esa ley habla de distintos tipos de productos finales, desde formulaciones magistrales en farmacias, el producto terminado en su estado vegetal, y luego las preparaciones o especialidades farmacéuticas”, expresó, y añadió que “en este decreto no se dice nada de eso”.

Durante la conferencia de prensa, Ferrés anunció que se está trabajando en la reglamentación de esa otra ley. En este sentido, el exsecretario general de la JND dijo que “lo ideal es que hubiéramos conocido las dos reglamentaciones simultáneamente”, ya que el nuevo decreto “es útil sobre todo para quienes producen para exportar”, pero “en términos de mercado de productos medicinales no aclara, o sea que al paciente uruguayo con esta reglamentación no le cambia nada la accesibilidad a los productos”.

“Uruguay se está perdiendo la oportunidad de desarrollar un programa de cannabis medicinal con la mayor seguridad para los pacientes y con un muy buen control de la producción, y con accesibilidad que hoy está restringida solamente a algunos productos elaborados a base de cannabidiol, que es una de los cientos de moléculas que están contenidas en el cannabis. Entonces, las personas que necesitan otro tipo de tratamientos, por ejemplo para el manejo del dolor, hoy no tienen una opción terapéutica en Uruguay, o no la tienen formalmente, acceden a través de redes informales o de la autoproducción”, expresó.