Durante la sesión matinal del Consejo del Mercado Común (CMC) del Mercosur, integrada por los cancilleres y ministros de Economía del bloque, Uruguay avisó a los socios “que comenzará a conversar con terceros para negociar acuerdos comerciales extrazona”. Así lo informó la cancillería luego del mediodía y la noticia tuvo repercusiones en distintos medios de Argentina, que plantearon el paso de Uruguay como una ruptura a la tradición de consenso del bloque y reportaron el malestar del país vecino.

“Uruguay entiende que la decisión 32/00 no está en vigor, ya que nunca fue internalizada”, agregó la declaración de Uruguay, sumando tensión, porque esto reaviva un viejo conflicto jurídico entre los países del Mercosur, derivado de una resolución tomada en el 2000 que establece que todos los socios deben avalar las negociaciones comerciales de los demás.

El debate acerca de su vigencia surge porque la norma no fue ratificada por los parlamentos de los países miembros, pero tanto Argentina como Paraguay han señalado en los últimos tiempos que lo consideran parte de la normativa del bloque.

El portal BAE informó, en base a fuentes de la cancillería argentina, que el gobierno vecino considera la postura de Uruguay “errónea” e “ilegal”. También indicaron que será clave la postura que adopte Brasil respecto de este paso de Uruguay, y señalaron que hay diferencias dentro de la delegación de aquel país.

Fuentes de la cancillería dijeron a la diaria que a los socios “no puede sorprendernos” el planteo de Uruguay, y ante las lecturas de ruptura desde Argentina aclararon que “Uruguay no rompió con el Mercosur”. La postura es comenzar a explorar negociaciones con terceros Estados, pero continuar apostando por la flexibilización del bloque. Las fuentes también señalaron que la postura de no reconocer la vigencia de la resolución 32/00 ha sido histórica de los gobiernos uruguayos. Agregaron que en la tarde la reunión del CMC terminó en tono cordial.

El CMC viene discutiendo y negociando hace meses dos asuntos: una propuesta de flexibilización para permitir acuerdos individuales —el camino que notificó empieza a andar Uruguay—, que presentó Bustillo a los socios en abril, y la rebaja del arancel externo común que impulsa Brasil.

Esto ocurre en la antesala de la cumbre virtual de mandatarios de este jueves, donde el argentino Alberto Fernández trasladará la presidencia pro témpore del bloque al brasileño Jair Bolsonaro. En la instancia participarán Luis Lacalle Pou, junto a su par paraguayo Mario Abdo Benítez, y también está prevista la presencia como invitados del presidente de Chile, Sebastián Piñera, y de Bolivia, Luis Arce.