El panorama político comenzó a despejarse en Alemania tras las elecciones del domingo, en las que los socialdemócratas fueron la fuerza más votada.

En una conferencia de prensa realizada este lunes en Berlín, Olaf Scholz, el líder del centroizquierdista Partido Socialdemócrata (SPD, por sus siglas en alemán), anunció su intención de llegar a conformar una “coalición social-ecológica-liberal” para poder formar gobierno.

“Los votantes dejaron muy claro lo que quieren”, expresó Scholz. El aspirante al cargo de canciller dijo que su partido, Los Verdes y el liberal Partido Demócrata Libre (FDP) habían obtenido un número significativo de nuevos votos en las elecciones, mientras que la conservadora Unión Demócrata Cristiana (CDU) sufrió una pérdida de apoyo de casi nueve puntos porcentuales.

“Y es por eso que tenemos un mandato visible que los ciudadanos de este país han formulado”, dijo Scholz, de acuerdo a lo que informó el diario inglés The Guardian.

Posteriormente, cuando se presentó en la sede partidaria, Scholz fue recibido efusivamente por integrantes del sector, y apelando a la tradición de estabilidad política del país dijo que “Alemania siempre tuvo gobiernos de coalición y siempre fue estable. Mi idea es que seamos muy rápidos en obtener un resultado para formar gobierno, y de ser posible debería ser antes de Navidad”.

Los Verdes y el FDP, que lograron 14,8% y 11,5% de los votos, respectivamente, podrían formar un bloque más fuerte que el SPD (25,7%) o la CDU (24,1%); acordaron mantener conversaciones entre ellos para poder acercar sus posiciones, que en muchos puntos son totalmente divergentes, antes de iniciar las negociaciones propiamente dichas, dijo este lunes el líder del sector liberal, Christian Lindner.

Por su parte el aspirante a la cancillería por la oficialista CDU, Armin Laschet, luego de haber sugerido tras las elecciones que buscaría formar gobierno, parece haber desechado la posibilidad por las fuertes críticas que está sufriendo hacia la interna de su sector.

En ese sentido, Markus Söder, líder del socio de Baviera de la CDU, la Unión Social Cristiana (CSU), dijo que “nadie que salga en segundo lugar puede aspirar a formar un gobierno”. En una línea similar se manifestó Michael Kretschmer, primer ministro de la CDU en el estado federado de Sajonia, que dijo que su partido “perdió las elecciones”.

“Se cometieron errores de fondo, de gobierno y también de elección de candidatos. Si seguimos así, me preocupa mucho lo que pasará dentro de cuatro años”, afirmó Kretschmer.

Berlineses a favor de las expropiaciones de viviendas

En una consulta no vinculante, que se realizó simultáneamente con las elecciones del domingo, 56,4 % de los berlineses se pronunció en favor de expropiar a las grandes inmobiliarias.

La inmobiliaria Deutsche Wohnen, propietaria de unas 113.000 viviendas en la capital alemana, es claramente el principal objetivo de la iniciativa, que justamente tenía como lema “Expropiar Deutsche Wohnen & Co”. Pero según informó la cadena Deutsche Welle, otras empresas se verían afectadas, como Vonovia, que está intentando comprar Deutsche Wohnen, y el Grupo Pears. Otra es la empresa sueca Heimstaden, que anunció en la noche de la votación que acababa de comprar 14.000 nuevas viviendas en Berlín.

La iniciativa popular, al no tener carácter vinculante, pretende que el Parlamento regional berlinés redacte un proyecto de ley para “socializar más de 240.000 inmuebles” pertenecientes a “grandes empresas inmobiliarias con ánimo de lucro” que posean más de 3.000 viviendas, que pasarían a ser de propiedad pública.

La votación en favor de esta propuesta es el resultado de un gran descontento por el precio de la vivienda, que registró un aumento promedio de los alquileres de 85% entre 2007 y 2019, aunque los valores siguen siendo muy inferiores a los de otras grandes capitales europeas como Londres o París.