La intendenta de Montevideo, Carolina Cosse, fue elegida para asumir como presidenta de la organización de Ciudades y Gobiernos Locales Unidos (CGLU), una red de 140 países, que será por primera vez en su historia conducida por una mujer. La decisión se tomó en la Cumbre Mundial de Líderes Locales y Regionales, que se desarrolla hasta este viernes en Daejeon, República de Corea. Cosse no asistió al evento, pero fue representada por la secretaria general, Olga Otegui, y la directora de Relaciones Internacionales y Cooperación, Fabiana Goyeneche.

Según puntualizó la Intendencia de Montevideo (IM) en un comunicado, Cosse es la primera mujer que ejercerá la presidencia en forma individual, ya que en 2004 la prefeita de San Pablo, Brasil, Marta Suplicy, compartió la dirección del organismo junto a otros integrantes de la red.

Tras conocerse la designación de Cosse, Otegui expresó que es signo del “consenso entre ciudades, el espíritu y los valores de esta organización. También son un fiel reflejo de las políticas del municipalismo feminista que fomenta hacia adentro y hacia afuera”, consignó la IM en su página web.

Otegui remarcó que desde la presidencia que ejercerá Cosse hay un compromiso a “trabajar para impulsar los cambios necesarios para construir un futuro donde se ponga en el centro a las personas. Todo el equipo está comprometido a trabajar para avanzar en derechos, porque aquí y en cualquier parte del mundo lo urgente es la gente”.

Desde 2004 esta organización, que es la más importante a nivel internacional relacionada con los gobiernos locales, busca impulsar temas relacionados a “los derechos humanos, desarrollo sostenible, inclusión social, innovación en la gestión gubernamental, participación de la mujer en los gobiernos locales y promoción de la paz a través de la diplomacia de las ciudades”.

La interna uruguaya con discrepancias

En agosto la diaria informó sobre el descontento que generó la nominación de Cosse en el Congreso de Intendentes. El anfitrión de aquella reunión fue Guillermo López, intendente de Florida, quien transmitió a sus colegas que la Federación Latinoamericana de Ciudades y Municipios (Flacma) le propuso a Uruguay llevar a un congresal que sería elector y elegible para la presidencia del CGLU.

Pero el representante de la IM, que fue el director de Recursos Financieros, Mauricio Zunino, en sustitución de Cosse, aseguró que la jefa comunal ya tenía un acuerdo con Flacma y Mercociudades (otra organización de la región) para ser candidata a presidir el organismo internacional, lo que causó la molestia de los blancos, que aseguraron no estar al tanto.

En ese momento, quien mostró mayor molestia fue el intendente de Paysandú, Nicolás Olivera, quien señaló: “No me queda claro qué margen de maniobra hay, más allá de ir al congreso y participar”. No sólo se quejó de que el Congreso de Intendentes ya no tendría lugar para presentar un candidato, o al menos no uno consensuado con la región, sino de que, según sus palabras, los jefes comunales no estaban al tanto del acuerdo que ya tenía Cosse.