La sesión del martes del Congreso de Intendentes, que se realizó en Florida, transcurrió con tranquilidad hasta uno de los últimos puntos del día, que refería a la participación en la cumbre de Ciudades y Gobiernos Locales Unidos (CGLU), la organización de gobiernos locales más grande del mundo.

El anfitrión de la reunión, Guillermo López, quien preside el Congreso de Intendentes, transmitió a sus colegas que la Federación Latinoamericana de Ciudades y Municipios (Flacma) le propuso a Uruguay llevar a un congresal que sería elector y elegible para la presidencia del CGLU. Pero el representante de la Intendencia de Montevideo, que fue el director de Recursos Financieros, Mauricio Zunino, en sustitución de Carolina Cosse, aseguró que la jefa comunal ya tenía un acuerdo con Flacma y Mercociudades (otra organización de la región) para ser candidata a presidir el organismo internacional, lo que causó la molestia de los blancos, que aseguraron no estar al tanto.

Instalado ya el debate, Zunino dijo que “tanto Mercociudades como Flacma han acordado postular como presidente del CGLU a la compañera intendenta Carolina Cosse”, y señaló que es un “acuerdo de estos organismos que se viene trabajando en los últimos meses”. En este sentido, apuntó que “Montevideo participa y va a estar presente” en el congreso del CGLU, lo que causó la sorpresa de los blancos, que pretendían llevar una candidatura acordada dentro del Congreso de Intendentes.

Quien mostró mayor molestia fue el intendente de Paysandú, Nicolás Olivera, que señaló: “No me queda claro qué margen de maniobra hay, más allá de ir al congreso y participar”. No sólo se quejó de que el Congreso de Intendentes ya no tendría lugar para presentar un candidato, o al menos no uno consensuado con la región, sino de que, según sus palabras, los jefes comunales no estaban al tanto del acuerdo que ya tenía Cosse. Dirigiéndose a López, expresó: “Usted acaba de decir que Flacma nos invita, pero ya Flacma tiene un entendimiento con Mercociudades para proponer un candidato que es integrante de este Congreso de Intendentes”.

El intendente de Florida dijo que él también se estaba enterando del acuerdo en ese momento y Olivera le pidió que analizara la “conveniencia” de participar en el congreso internacional. Agregó que si el Congreso de Intendentes aún tenía la posibilidad de proponer un candidato, quería que fuese López.

Otros intendentes blancos, como Omar Lafluf, de Río Negro, fueron por la línea de fijar “el compromiso” que el Congreso de Intendentes tiene de estar presente en el encuentro internacional y que “después se verá” qué tipo de representación puede tener. El de Cerro Largo, José Yurramendi, también dijo que “hay que estar” pero “sin pasar vergüenza”. “Si estamos y después no votamos a un integrante de este grupo, como país no quedamos muy bien”, dijo.

El intendente de Florida declaró a la diaria que le fue encomendado “articular” dentro del Congreso de Intendentes, lo que implica conversar con la comuna capitalina para ver qué margen de negociación queda. Consultado sobre la molestia de los intendentes blancos, dijo que “había cierta inquietud”, principalmente porque se enteraron ayer mismo de la candidatura de Cosse. “Veremos de compatibilizar lo que nos mandató el Congreso de Intendentes” con la aspiración de la Intendencia de Montevideo, dijo López, quien resaltó la necesidad de evitar “hacer un papelón”.

Distintas fuentes del Congreso de Intendentes manifestaron a la diaria que en los últimos años se intentó retomar vínculos internacionales que se habían perdido, pero en esta materia Montevideo es referencia y “tiene un rol protagónico”. Algunos entienden que, pese a que Cosse tiene competidores de otros países para liderar el CGLU, seguro un integrante del Congreso de Intendentes sin roce internacional tendría menos chances de ganar.

Las críticas a Cosse y la copa rota

El intendente de Paysandú fue el que estuvo más ácido con la intendenta de Montevideo, quien no estuvo presente y en su lugar envió a Zunino, lo que derivó en algunos comentarios, pese a que no fue la única jerarca departamental que se ausentó. Además de la molestia por el tema internacional, en un momento anterior de la sesión, cuando se discutía otro punto del orden del día, Olivera se dirigió a Yamandú Orsi, de Canelones, ya como precandidato a la presidencia de la República por el Frente Amplio, y destacó positivamente que siempre asiste a las reuniones. En contraposición, se refirió a Cosse como posible contendiente y dijo: “La otra no viene mucho”.

El comentario causó algunas risas entre los presentes, pero más risas provocó –y sin distinciones partidarias– un episodio que protagonizó cuando los intendentes se sentaron alrededor de una mesa larga para almorzar. Olivera se levantó de su silla y comenzó a golpear una copa con un cubierto como quien pide silencio para hablar, y la copa se rompió. Después de las carcajadas, el intendente de Paysandú habló y felicitó a su correligionario floridense por el evento.