La Junta Departamental de Montevideo (JDM) aprobó el jueves el pliego para que la Intendencia de Montevideo (IM) abra un llamado a licitación para construir 440 nuevos refugios peatonales en paradas de ómnibus, de las cuales al menos 100 deberán tener paneles de información relacionada al transporte público y pantallas digitales para publicidad.

El proyecto quedó detallado en una sesión de la Comisión de Legislación y Apelaciones de la JDM el 11 de octubre, cuando el director de Transporte, Pablo Menoni, concurrió a explicarlo. Según la versión taquigráfica de aquella sesión, el jerarca señaló que el objetivo de la licitación será “la modernización de los refugios peatonales”.

Describió que “la base obligatoria es la sustitución de 440 refugios” y que las zonas de las instalaciones ya “están delimitadas”: abarcan “el Centro, Avenida Italia, las principales avenidas, la rambla, Libertador, Paraguay, etcétera; es decir, las más atractivas desde el punto de vista comercial”. “De esos 440 refugios, nosotros pedimos que 100 tengan tanto paneles de información como pantallas digitales de publicidad”, explicó Menoni. Allí habrá “información en tiempo real acerca de cuándo van a llegar los próximos ómnibus a esa parada”.

Está previsto que la IM no gaste dinero en las obras, sino que el financiamiento correrá por cuenta de la empresa a la que se adjudique la licitación, cuya ganancia surgirá de la venta de publicidad para las pantallas durante 15 años. La única condición es que “cada cinco minutos de publicidad” la IM se reserve uno “para contenido institucional”.

También está dentro de “la base obligatoria la recuperación de 275 refugios de madera”, concentrados principalmente en Avenida Italia, el Prado y las inmediaciones del estadio Centenario. Menoni explicó que “quienes cumplan con esa base obligatoria van a pasar a la segunda instancia”, considerada opcional, que “consta de cuatro elementos a puntuar: cantidad de refugios nuevos adicionales, recuperación de más refugios, quien oferte más paneles de información y quien oferte más pantallas digitales”. En definitiva, “quien ofrezca más se lleva todo el puntaje”.

El pliego se aprobó el martes en comisión y el jueves en el plenario de la JDM. Finalmente, sólo contó con los votos a favor del Frente Amplio (FA), la bancada oficialista en la capital, mientras que no acompañaron los ediles del Partido Nacional (PN) ni los del Partido Colorado.

“Se está violando el principio de igualdad de los oferentes”

La discusión sobre la aprobación del pliego giró fundamentalmente en torno a la presunta filtración del documento a una de las empresas interesadas. “Para nada nos oponemos a un recambio de los refugios peatonales”, dijo el edil del PN Javier Barrios Bove, quien fue el encargado de llevar el informe en minoría, al inicio de su alocución. Luego agregó que, para este mismo tema, ya fracasaron en anteriores administraciones “cuatro procesos licitatorios”. “Vamos a tener que votar en contra de este pliego y proyecto porque no queremos que haya un quinto proceso licitatorio que fracase por temas de fondo y forma”, apuntó.

Con respecto al fondo del asunto, dijo que este “es muy similar al pliego que fracasó en la última instancia; es más, pide más que el pliego anterior” y aquel “fracasó por lo que pedía”, por tanto, afirmó que este tampoco tendrá éxito y debe buscarse otra forma de financiamiento que no sea la venta de publicidad durante 15 años.

Sin embargo, dijo que “lo más grave que ha pasado ha sido el tema de la forma”, porque a raíz del interés surgido “varias empresas solicitaron ser recibidas por la comisión” que estudiaba el texto. Entonces “compareció una empresa e hizo una exposición detallada, meticulosa, yendo a los conceptos finos de la licitación. Habla de cláusulas y anexos. Cita entrecomillado, textual”, sostuvo.

Barrios Bove llegó a la conclusión de que la empresa “conoció el pliego antes que las otras empresas, y con esto se está violando el principio de igualdad de los oferentes”. A su entender, esto “es grave” porque provocará que algunas de las otras empresas interesadas impugnen el llamado, lo que llevaría “a un quinto fracaso”. “No sé si fue la Intendencia, la Junta, quién se lo dio a la empresa, pero la empresa lo tenía”, sentenció. “Este proceso licitatorio va a nacer viciado”, dijo, y concluyó que es “una vergüenza”.

La edila del FA Estela Pereyra, presidenta de la comisión que estudió el proyecto, fue la encargada de llevar el informe en mayoría. Al iniciar descartó de plano las acusaciones de Barrios Bove porque señaló que todas las empresas que fueron a la comisión plantearon “alternativas al pliego y no se hicieron”, lo que demostraría que no se buscó beneficiar a una en particular. “Las garantías están dadas porque el pliego no se modificó”, dijo, y agregó que quien filtró el documento “pudo haber sido cualquiera” y no necesariamente alguien de la IM o del oficialismo en la JDM.

Sobre el proyecto en sí, Pereyra lo calificó como “muy ambicioso, innovador, que apunta a la incorporación de tecnologías vinculadas al servicio del usuario de transporte público”, y resaltó que para esta mejora “la IM no pone un solo peso”.