La media hora previa de la sesión de la Cámara de Senadores de este miércoles transcurrió con normalidad. Tras la votación para elegir a los integrantes del cuerpo para este año, la senadora Graciela Bianchi, que estaba presidiendo la sesión, llamó a la senadora frenteamplista Amanda Della Ventura a tomar posesión como segunda vicepresidenta de la cámara, como indica el reglamento.

Sin embargo, al ver que el tapaboca de Della Ventura era rosado y tenía una identificación por el Sí a la anulación de los 135 artículos de la ley de urgente consideración, Bianchi expresó: “En mi condición de presidenta del Senado le voy a solicitar que se saque la identificación por una de las opciones en el referéndum”.

“Los que estamos sentados acá, todos, no tenemos que estar identificados –y sobre todo en la presidencia del Senado– con ninguna opción política. Se lo solicito por el bien de la República, porque yo también podría haber venido con una identificación política y jamás se me ocurriría”, acotó.

Luego agregó que no le molestaba el color, sino las “identificaciones políticas partidarias”. Ante el reclamo de legisladores del Frente Amplio, manifestó que no iba a discutir. Seguidamente, los senadores de la oposición se retiraron de la sala. “Que se vayan, no tengo problema. La República está por encima de todos”, afirmó Bianchi y concluyó la sesión.

No es la primera vez que Bianchi sale al cruce de Della Ventura por hechos de este tipo. Durante el primer año de la legislatura, en una sesión de la Comisión de Asuntos Administrativos del Senado, Bianchi, quien presidía la sesión, le exigió que se sacara la camiseta que decía “desafuero o complicidad”, en relación al desafuero que finalmente no se aprobó del líder de Cabildo Abierto Guido Manini Ríos por omisión de información sobre declaraciones de José Gavazzo ante un tribunal de honor militar. “Le dije que era censura, porque en democracia tenemos derecho a ponernos lo que queramos”, relató en ese entonces Della Ventura a la diaria.