El presidente de la Cámara de Diputados, Ope Pasquet, cuestionó este jueves la conveniencia de que Uruguay firme un tratado de libre comercio (TLC) con China, debido a la relación que este país tiene con Rusia.
Lo hizo en una carta enviada al director del semanario Búsqueda, en la que el legislador colorado señala que “en este nuevo escenario internacional, un TLC entre Uruguay y China no significaría lo mismo que hubiese significado hace uno o dos años”, a raíz de la invasión rusa a Ucrania. “Vuelven a soplar vientos de guerra y no se sabe cuál será su intensidad, ni su dirección, ni su duración”, advierte.
En el texto, Pasquet añade que Uruguay “siempre ha formado parte de Occidente” y que tanto su cultura como sus instituciones, como la democracia, los derechos humanos y el Estado de Derecho, “son occidentales”.
Afirmó también que “en las dos guerras mundiales del siglo XX nuestra condición de no beligerantes no impidió que el sentimiento nacional estuviese claramente del lado de las democracias en lucha contra el Kaiser, primero, y contra el Führer después”, y que durante la Guerra Fría (1947-1991) “las simpatías de la gran mayoría del pueblo uruguayo y los gobiernos que el pueblo eligió estuvieron del lado de los Estados Unidos y la democracia que ellos representaban, no del lado de la URSS, el régimen comunista y el infame muro de Berlín”.
Por este motivo, se preguntó si durante este conflicto, y a raíz de las negociaciones por el TLC con China, “vamos a cambiar nuestros alineamientos históricos, pasando del lado de los amigos de Ucrania al lado de los amigos de Rusia”.
El presidente de los diputados señaló en la carta enviada a Búsqueda que no se puede decir que “un acuerdo comercial no tiene por qué tener consecuencias más allá de lo estrictamente comercial o económico”, ya que “un TLC tiene siempre un componente político”. “En este caso nos estamos refiriendo a un acuerdo entre un país de 1.400 millones de habitantes y otro de 3,5 millones de habitantes. Es evidente que el país más poblado del planeta no le otorgará a Uruguay la posibilidad de acceder libremente a su inmenso mercado, a cambio de la posibilidad de acceder al mercado uruguayo”, consideró.
En este sentido, Pasquet concluyó que “la contraprestación que reciba la parte china no puede ser esa; ha de ser de otra naturaleza, política y estratégica”, y que al ser calificado por la cancillería como un “acuerdo estratégico integral”, el Ejecutivo está reconociendo que “no es sólo el comercio lo que está en juego”.
Luego, destacó que China es el principal cliente de Uruguay desde hace varios años y que al aumentar las exportaciones a ese mercado, también lo hará la dependencia económica de ese país. “Llegará un día en el que no podremos decirle no a nada que se nos proponga, porque las consecuencias de la negativa podrían llegar a ser insoportables. ¿Estamos dispuestos a quedar en esa situación, aun a cambio de poder exportar más, sin aranceles?”, se preguntó.
El diputado colorado advirtió también que el acuerdo podría permitirle a China tener la disponibilidad de un puerto en las costas uruguayas al que “en una situación de conflicto con los Estados Unidos pudiera darle un uso militar de cualquier tipo”, lo que podría “comprometer” la paz en el Atlántico Sur, especialmente al tener en cuenta que Reino Unido, aliado del gobierno estadounidense, ya cuenta con otro puerto en las Islas Malvinas.
En este sentido, Pasquet concluyó que si el TLC con China se acordara por fuera del Mercosur, en un momento de guerra en Europa y una potencial segunda Guerra Fría, la firma del tratado dejaría a Uruguay “en la vereda de enfrente a los Estados Unidos, el Reino Unido y la Unión Europea, y nos distanciaría de Brasil y de Argentina, para acercarnos a una superpotencia cuyo régimen político y valores fundamentales son muy distintos de los nuestros”.
Cabildo Abierto
En una línea similar a las declaraciones de Pasquet se había expresado previamente el dirigente de Cabildo Abierto Marcos Methol, uno de los fundadores del partido, senador suplente y redactor responsable de La Mañana.
Entrevistado por la diaria el pasado sábado, Methol sostuvo que le costaba “entender cuál puede ser el interés comercial de China con Uruguay, más allá de que somos un punto estratégico en la Cuenca del Plata y el Atlántico sur” y del “margen de negociación” que el gobierno uruguayo pueda tener en una situación así.
“Todos estamos esperando ver los resultados de ese estudio de factibilidad, pero hay temas para tener en cuenta desde ahora: cómo puede impactar en determinadas industrias, cómo puede impactar en términos de soberanía y estrategia, y también en nuestro relacionamiento con Brasil y Argentina, que podría verse afectado por un acuerdo de este tipo”, señaló.
También planteó que a raíz de “la pospandemia y la situación de guerra en Ucrania”, ahora existen “muchos países europeos con problemas de seguridad alimentaria y desabastecimiento”. Según Methol, esto debe ser visto como una “oportunidad” que permita reflotar un acuerdo con la Unión Europea a través del Mercosur.