Luego de que fracasara la aprobación del préstamo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para la Intendencia de Montevideo (IM) para mejorar la limpieza y el saneamiento, la presidenta de la Departamental de Montevideo del Partido Nacional (PN), Laura Raffo, dijo que dieron su negativa “en defensa de las necesidades urgentes de la población más vulnerable” de aquellos barrios que no tienen saneamiento y drenaje pluvial.
Raffo cuestionó si es de “buena fe” haber entregado a la Junta Departamental un proyecto que “contemplaba llevar saneamiento a solamente 2.000 personas, cuando 80.000 personas lo estaban esperando”. “¿Es de buena fe dejar a 78.000 montevideanos y sus familias entre las aguas podridas para destinar ese dinero que podría ser para saneamiento en la compra de camiones, de contenedores y publicidad, con un préstamo que pagaríamos los montevideanos durante los próximos 25 años? No parecería ser de buena fe”, se quejó en conversación con el canal 4.
Para Raffo, la conferencia de prensa de la intendenta Carolina Cosse fue “un discurso sumamente contradictorio” e insistió en que con esta posición miran a las familias “más vulnerables”: “Lo que pasa es que la inversión en las familias más vulnerables no es la inversión que más se ve”.
Al ser consultada por los dichos de Cosse, quien dijo que la oposición departamental hizo “política menor”, Raffo sostuvo que no es así y afirmó que “política mayor” sería aprobar la moción que presentó el PN de invertir 30 millones de dólares con fondos propios para saneamiento. “La IM dijo que disponía de ese dinero sin pedir un préstamo, por lo tanto lo que pedimos es que sea sólo para el saneamiento”, repitió, y afirmó que ahí está “la llave” para votarlo.
Silencio
Por su parte, el senador del PN Gustavo Penadés pidió a Cosse que “se llame a silencio unos días”. Entrevistado por la radio Montecarlo, le dijo a la jefa comunal que “haga una introspectiva y luego, que empiece a trabajar nuevamente en buscar acuerdos con los restantes partidos políticos para ver si puede obtener esos recursos que supuestamente necesita para solucionar estos problemas”. “En realidad, la primera idea que se me vino a la cabeza cuando la escuché fue: ‘En política no hay nada que rinda más que hacerse la víctima’”, agregó.
“Lo que transmite es cierto grado de frustración y de imposibilidad de haber tenido la habilidad de lograr acuerdos que estuvieron muy cerca de concretarse, y que si no se concretaron fue justamente por el capricho del gobierno departamental de Montevideo de querer llevar adelante un préstamo con el BID en el cual las prioridades no estaban fijadas en los temas que el PN entendía como fundamentales”, añadió Penadés.