El lunes la diaria informó que la coalición de gobierno desistió en su intención de reformular este año la ley de 2008 que creó la Institución Nacional de Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo (INDDHH), un planteo que había surgido semanas atrás de la vicepresidenta Beatriz Argimón y recabó opiniones favorables en los demás socios. La decisión, informada desde el Partido Nacional (PN), causó sorpresa en Cabildo Abierto (CA), el socio de la coalición que mayores críticas lanzó hacia la INDDHH.

La senadora del PN Graciela Bianchi dijo el lunes que tenía “casi pronto” un proyecto de ley para “fijar mejor las competencias” de la INDDHH, que “son muy difusas”, y “darle mucho más fuerza a la defensoría del pueblo, que prácticamente no existe”, pero señaló que como “hay que cambiar a las autoridades –hay que cambiarlas ya–, no dan los tiempos parlamentarios para aprobar o rechazar el proyecto de ley”.

“Es algo del PN, no nos comprende a nosotros”, aseguró a la diaria el senador cabildante Guillermo Domenech, y señaló que no tiene “ningún conocimiento” de que su partido haya participado en esa decisión. Agregó que se enteró de la noticia por los medios en la mañana del martes y para él fue “una sorpresa”. Indicó que en política “siempre se puede dialogar”, pero no sabe “qué posibilidades hay de revertir esa posición del PN”. “Es un tema importante, ahora estudiaremos el nuevo escenario”, acotó.

Domenech es uno de los legisladores de la coalición que públicamente ha sido más crítico con la INDHH. En setiembre de 2021, en el espacio de CA en radio Universal, había señalado que ese organismo es “inconstitucional”, en tanto sus potestades son las del Poder Judicial. “CA es un firme defensor de los derechos humanos, pero la defensa de los derechos humanos no debe significar una careta, una pantalla, para defender determinadas posiciones políticas en desmedro de otras y constituir una acción política sesgada que deforme la verdadera naturaleza de los derechos humanos”, opinó.

Domenech también había cuestionado el funcionamiento actual del organismo, que a su entender “se ha caracterizado por ser el refugio de personas que fracasaron políticamente o tienen actuaciones que desde el punto de vista de los derechos humanos son absolutamente intrascendentes”. 

Según lo informado por la diaria, la idea en la coalición es ofrecer al Frente Amplio que la conformación del nuevo directorio sea con cuatro integrantes elegidos por el oficialismo y uno por la oposición. Hoy la institución es conducida por Wilder Tayler, María Josefina Plá, Mariana Blengio, Juan Faroppa y Mariana Mota.