El canciller Francisco Bustillo se refirió este viernes al narcotraficante uruguayo Sebastián Marset, que sigue prófugo de la Justicia a nivel internacional luego de que el gobierno uruguayo le otorgara un pasaporte que lo habilitó a dejar Dubái, donde estaba detenido por tener un pasaporte paraguayo falso. Según aclaró el jerarca, por este caso “no hay investigación ninguna en la cancillería” y entiende que tampoco la ha habido en el Ministerio del Interior.

El canciller apuntó que “simplemente se ha venido trabajando en un nuevo proyecto de decreto. A la luz de los acontecimientos quedó claro que había un instrumento que era imperfecto y que permitió, en definitiva, que actuando conforme al marco legal, el ciudadano uruguayo Marset adquiriera la libertad”, afirmó Bustillo.

El ministro remarcó que el decreto actual “mostró sus falencias”, y que trabajan en conjunto con el Ministerio del Interior “para evitar que nuevas situaciones de este tipo se puedan generar”. “Si algo tiene el Uruguay es un nombre muy bien ganado internacionalmente en todas las áreas en que le ha tocado actuar, y esta no es más que una de ellas”, puntualizó.

Según lo manifestado por el gobierno, en la respuesta a un pedido de acceso a la información pública realizado en marzo por legisladores del Frente Amplio, el pasaporte de Marset –que recibió el abogado Alejandro Balbi– fue entregado en cumplimiento del Decreto 129/014, de mayo de 2014, que aprueba el reglamento de expedición de pasaportes.

En su artículo 29, el reglamento plantea que para la expedición de pasaporte común a uruguayos en el exterior se requerirá consulta de antecedentes judiciales en Uruguay. Ese procedimiento se cumplió y se informó que al momento de entregarlo Marset no tenía causas abiertas en el país.

Por otra parte, este viernes el presidente de Colombia, Gustavo Petro, se pronunció a través de su cuenta de Twitter sobre la relación del narco uruguayo con el asesinato del fiscal paraguayo Marcelo Pecci, cometido en territorio colombiano. Según el mandatario, esto “demuestra que hace mucho el narco dejó de ser un problema bilateral colombo-estadounidense y es hoy un problema americano y mundial”.

Al respecto, Bustillo aseguró que comparte esa visión de preocupación regional. “Es preocupación no sólo de Uruguay sino de América toda la lucha contra el narcotráfico y contra las bandas que vienen actuando”, subrayó.