En el marco del tradicional almuerzo organizado por la Asociación de Dirigentes de Marketing, desfiló sobre las alfombras del hotel Radisson el ministro de Defensa Nacional, Javier García, quien expuso sobre el rol de las Fuerzas Armadas (FFAA), opinó sobre la reforma educativa y el papel de los sindicatos, criticó a la oposición, dio su visión sobre el pasado reciente, habló sobre lo que dejó la pandemia y las tareas que quedan, y paró la mano con la campaña electoral.

Sobre el primer punto, semanas después de que el referente frenteamplista Marcos Carámbula aventurara la idea de plebiscitar a las FFAA, García fue tajante ante decenas de empresarios y correligionarios de su partido: “¿Alguien tercerizaría esta función esencial de nuestro Estado? Reiteradamente surgen voces de prejuicios y un antimilitarismo adolescente que plantean eliminar las FFAA. Uno tiene el derecho a preguntarse a quién o quiénes beneficiaría que no existan las FFAA”, cuestionó.

En ese sentido, dijo que desde su cartera no van a “permitir” que la “ideología o los prejuicios valgan más que nuestras instituciones”, y consideró que desde que se inició la administración de Luis Lacalle Pou los militares tienen el “respeto y respaldo” que “se merecen de su mando civil y político”.

García comenzó su oratoria diciendo que la defensa no es un “tema militar, de cuarteles y soldados”, y que el sistema político y la opinión pública le empezaron a prestar más atención a las FFAA por el pasado reciente o la corrupción. Para García, en ese sentido, se parte de una visión “reduccionista e injusta”, porque desde “[José Gervasio] Artigas hasta acá, las FFAA son parte central de la institucionalidad uruguaya”, y lo vinculó con la fundación de los cuatro “grandes” partidos políticos porque fueron fundados por militares: Manuel Oribe dio nacimiento el Partido Nacional; Fructuoso Rivera, al Partido Colorado; Líber Seregni hizo lo suyo con el Frente Amplio y, más recientemente, Guido Manini Ríos con Cabildo Abierto.

Si bien dijo que no van a “hacerle la guerra a nadie”, García consideró que “hay nuevas amenazas” que son “más peligrosas” y que hacen “imperiosa” la necesidad de tener unas FFAA. Nombró como principales problemas el narcotráfico, el terrorismo, los ciberataques, el cuidado y la protección de los recursos naturales y riquezas, el control del espacio aéreo, como también el cambio climático y las consecuencias que conlleva. “Todas estas son, entre otras, las nuevas amenazas a nuestra seguridad humana en las que la política de defensa tiene un rol estratégico clave”, expresó.

Los demonios

Tal como planteó al principio, el titular de Defensa insistió con que anteriormente no se les prestaba la debida atención a las FFAA hasta que inició el “llamado pasado reciente”. En ese marco, indicó que “para un país que no llega a 200 años de vida constitucional, 60 años de historia, casi la tercera parte de la misma, no parece ser muy reciente”, pero igual, dijo, “todos conocemos cuando nos referimos a eso”.

Fue así que expresó que se “resiste” a que “se quiera asociar a soldados u oficiales actuales con los enfrentamientos de hace 60 años”: “Primero, porque no es verdad, y segundo, porque esconde la intención de señalar a servidores públicos en general y a una institución, en particular, a las FFAA, por lo que algunos hicieron. Yo no sé si hubo uno, dos o 20 demonios, pero tengo claro que los hubo vestidos de militar y de civil”, señaló, y agregó que Uruguay “vivió enfrentamientos y violaciones a los derechos humanos que provinieron de militares y de militantes. Hubo terrorismo de Estado y terrorismo de algunos que luego fueron Estado”, sostuvo, lo que le valió aplausos. En ese sentido, aseguró que su “responsabilidad” como gobernante “es trabajar por la paz y unidad de los uruguayos”.

A su vez, García remarcó que lidera la cartera que dio “mayor información y con mejor calidad” a organizaciones vinculadas a los derechos humanos, como también a la Justicia. “Dimos, incluso, información que otros, vaya a saber por qué, no dieron”, acusó, y afirmó que en lo que va de la gestión recibieron 255 pedidos de acceso a la información, que superan “ampliamente” a los 180 recibidos en los 11 años previos. “Si hacen la cuenta, recibimos 102 pedidos de acceso por año y en los años previos, 16. Gran parte de ellos vinculados a temas de derechos humanos y del pasado. No nos preocupa en absoluto, porque el signo de nuestra gestión es la transparencia”, señaló.

Asimismo, García afirmó que el gobierno actual no tiene “deudas con el pasado”, ni nada que los “avergüence, ni compromisos con componendas o teorías de los combatientes”. “No dejaremos de trabajar para que haya paz en los hogares que aún no encontraron a sus hijos y familiares desaparecidos, pero es hora de construir futuro. Las nuevas generaciones también nos esperan”, añadió.

No es tiempo de campaña electoral

En tiempos en que se habla de nombres que se ponen y sacan de la mesa, García señaló que no es momento de hablar de candidaturas. Estas palabras llegan luego de que el intendente de Durazno, Carmelo Vidalín, le pidiera públicamente al secretario de Presidencia, Álvaro Delgado, que sea precandidato presidencial en las elecciones de 2024, lo que generó roces internos y que incluso haya agrupaciones minoritarias que se adelantan para proponer otros nombres.

“Ninguna estrategia sectorial partidaria puede poner en riesgo el cambio que la ciudadanía nos encomendó. Mi partido, el mayoritario hasta ahora, debe ser ejemplo en no adelantar la campaña electoral. No podemos exigir a los demás lo que no hacemos nosotros primero. También tenemos claro que prometimos cambios y que apenas va la mitad del mandato, y que además de esa mitad del mandato, dos años estuvieron dedicados en buena medida a la pandemia”, indicó.

Por lo tanto, dijo, van a tener un período de gobierno de “ciclo corto”, lo que debe evitar “perder de vista que estamos en tiempo de gobierno y no de elecciones”, estableció. Esta valoración también generó aplausos de los comensales. “Sin una buena gestión no hay reelección de gobierno. La mejor campaña en el futuro es mostrar lo bueno que hemos hecho”, concluyó.